Washington (EFE)
El presidente de EE.UU., Barack Obama, ofreció al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, mediar para lograr un alto el fuego entre Israel y el movimiento islamista Hamas, y urgió a ambas partes a "restaurar la calma" ante una situación que ha causado la muerte de casi 90 palestinos en apenas 72 horas en la franja de Gaza.
En una conversación telefónica, Obama aseguró a Netanyahu que Estados Unidos "sigue preparado para facilitar un cese de hostilidades, incluido un regreso al acuerdo de alto el fuego de noviembre del 2012", que fue mediado por la entonces secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton.
Obama "reiteró la fuerte condena de EE.UU. a los continuos disparos de cohetes contra Israel por parte de Hamas y otras organizaciones terroristas y reafirmó el derecho de Israel de defenderse contra estos ataques", indicó la Casa Blanca en un comunicado.
"El presidente (Obama) expresó su preocupación por el riesgo de una mayor escalada de violencia y enfatizó la necesidad de que todas las partes hagan todo lo que puedan para proteger las vidas de los civiles y restaurar la calma", añade el comunicado.
En otra conversación telefónica, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, pidió hoy al secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, que intervenga para lograr un alto el fuego inmediato.
No obstante, Netanyahu insistió este jueves en que su país tiene el derecho y la obligación de defenderse y afirmó que seguirá con la operación hasta que logre sus objetivos declarados: acabar con la infraestructura de Hamas y detener el lanzamiento de cohetes.
La ofensiva militar de Israel contra Gaza, que en apenas 72 horas ha causado la muerte a 88 personas, la mayor parte de ellas civiles, se produce en respuesta al disparo de cohetes contra el sur del territorio israelí por parte de las Brigadas Azedin Al Qasam, el brazo armado de Hamas.
Obama volvió a expresar sus condolencias a Netanyahu y al pueblo de Israel por uno de los detonantes de la actual crisis: el asesinato de tres estudiantes judíos desaparecidos en Cisjordania. Además, el presidente estadounidense celebró el arresto de sospechosos por el secuestro y asesinato del menor palestino Mohamed Abu Jdeir.
También mostró su "preocupación" por la situación de Tariq Abu Jdeir, un joven palestino-estadounidense liberado esta semana tras ser detenido y supuestamente apaleado por policías israelíes.