El tesorero del gobernante Partido de los Trabajadores de Brasil, Joao Vaccari, sospechoso de lavar dinero y aceptar sobornos en el megaescándalo de Petrobras, fue arrestado este miércoles, informó a la AFP la policía federal de Paraná (sur).
Vaccari "fue detenido en Sao Paulo" en la mañana del miércoles y será transferido a Curitiba (Paraná), donde el juez Sergio Moro investiga una enorme red de corrupción en la estatal petrolera que movilizó más de 4.000 millones de dólares en una década, informó un portavoz de la policía que no quiso identificarse.
Vaccari fue denunciado por la fiscalía por recibir sobornos provenientes de contratos amañados y registrarlos como donaciones electorales, y hasta este miércoles respondía al proceso en libertad.
El tesorero del PT niega tajantemente las acusaciones y asegura que es inocente.
Algunos acusados de corrupción en la estatal que colaboran con la justicia a cambio de una reducción de su pena han señalado que Vaccari recibía sobornos, se reunía clandestinamente con financistas del mercado negro, tenía cuentas bancarias a nombre de familiares y utilizaba sobreprecios pagados por empresas constructoras en contratos de la petrolera para luego girar esos fondos hacia su partido.
El PT rechaza asimismo las acusaciones contra su tesorero. Vaccari "no participó de ningún esquema para recibir sobornos o recursos de origen ilegal destinados al PT", indicó la fuerza en marzo.
"Vaccari no ocupaba el cargo de tesorero del PT en el período citado por los fiscales en la acción aceptada por la justicia, ya que asumió ese puesto en febrero de 2010", agregó el PT el mes pasado.
El megaescándalo de corrupción en Petrobras, la principal empresa inversora del país y hasta hace poco orgullo de los brasileños, amenaza con salpicar al izquierdista PT, al investigar también la forma en que costeó su funcionamiento, incluyendo la financiación de la primera campaña presidencial de la mandataria Dilma Rousseff en 2010.
"Petrobras está de pie, limpió lo que tenía que limpiar. Sacó a todos los que tenía que sacar y que se aprovecharon de sus posiciones para enriquecerse", dijo Rousseff la semana pasada.
A solo tres meses de haber comenzado su segundo mandato, la presidenta ha visto derrumbarse su popularidad al 13% y ya ha enfrentado dos grandes protestas nacionales con cientos de miles de personas en las calles indignadas por la corrupción, muchos de ellos pidiendo su 'impeachment' y su salida del gobierno.
Fuente: AFP