En Semana Santa se conmemora la muerte de Jesús en la cruz, pero poco es lo que sabe sobre tal acontecimiento. La fe, la historia y el misterio envuelven diversas hipótesis que se mantienen alejadas de una confirmación real.
El periodista del diario español El País, Juan Arias, autor del libro Jesús, afirmó que "aún no sabemos quiénes, ni por qué mataron a Jesús".
Su entierro se hace plausible tras el descubrimiento de un cadáver perteneciente a un reo que recibió sepultura, una práctica no convencional de la época, cuando dejaban descomponerse los cuerpos a la vista de todos. Además, una inscripción hallada en Cesarea Marítima confirma la existencia de Poncio Pilatos como gobernador romano en época de Tiberio.
Una de las pocas certezas entre los historiadores es que la muerte de Jesús tuvo lugar durante la Pascua judía (Pésaj), en la que se conmemora la liberación de la esclavitud en Egipto, una de las fiestas más importantes del calendario hebreo.
Pésaj depende de las fases lunares y el equinoccio de primavera. "Existe una conexión muy sólida entre la Pascua judía y la pasión", asegura Carl Savage, profesor de arqueología bíblica en la Universidad de Drew citado por El País. "Es muy plausible que ocurriese durante ese periodo, aunque incluso los propios Evangelios aportan calendarios ligeramente diferentes sobre los acontecimientos de la última semana de vida de Jesús", agrega.
— ¿Cuándo murió? —
Preguntado sobre las certezas históricas que rodean la muerte de Jesús, el investigador de la Universidad de Saint Louis Douglas Boin, autor de un estudio sobre los cristianos bajo el imperio romano, responde que “Jesús fue ejecutado en la provincia romana de Judea por el prefecto de la provincia, Poncio Pilatos. Eso es todo. Incluso la fecha, probablemente en torno al 28 después de Cristo, es una suposición informada".
Muchos investigadores barajan la fecha del 14 de Nisán, esto es, el viernes 3 de abril. Pero ni siquiera los Evangelios se ponen de acuerdo: Marcos, Lucas y Mateo hablan de un día y Juan de otro. En su libro sobre Jesús, el predecesor del papa Francisco, Benedicto XVI, apoya la tesis de Juan, lo que adelantaría un día la condena y la muerte.
Son las fuentes no cristianas, sobre todo Tácito, las que permiten establecer un calendario más o menos preciso. De acuerdo con el historiador romano, una persona a la que su gente llamaba Mesías murió en la cruz bajo el reinado de Tiberio por el gobernador Poncio Pilatos. "Estas fechas son especialmente útiles para los historiadores", explica Savage. "
El emperador Tiberio gobernó Roma entre el 14 y 37 después de Cristo, sabemos que Jesús nació entre el 7 y 4 antes de nuestra era al final del reinado de Herodes.
Como explica la historiadora Mireille Hadas-Lebel en su biografía Flavio Josefo, algunos estudiosos creen que todo el pasaje es falso, mientras que otros opinan que "algún piadoso lector cristiano de principios del siglo IV" agregó algunas frases.
Hadas-Lebel comenta que los autores de los Evangelios se guían por agendas teológicas. “Como historiador los considero importantes, pero deben ser analizados con cautela", dice.
El huerto de Getsemaní, la traición de Judas, la última cena, la negación de Pedro, Poncio Pilatos dando a elegir entre Barrabás y Jesús o lavándose las manos: ninguno de estos episodios están confirmados y, en el caso de los dos últimos, son una clara manipulación a juicio de la mayoría de los investigadores.
— ¿Por qué? ¿Quién? —
Sin embargo, la clave no está en cómo fue ejecutado, sino en el por qué y por quién. Los Evangelios acusan a los judíos, una afirmación que ha propiciado 2.000 años de antisemitismo, una de las más violentas, trágicas y perdurables lacras de la historia de la humanidad.
Juan Arias recuerda que "fue el papa Juan XXIII quien en 1959 mandó quitar de la oración de Viernes Santo la expresión 'pérfidos judíos' y la de 'obcecación de aquel pueblo' que se negaba a reconocer la divinidad de Jesús".
Reza Aslan argumenta en El Zelote, una biografía de Jesús que se convirtió en 2014 en una éxito internacional, que los Evangelistas exculparon a los romanos porque "Roma se había convertido en el principal público del evangelismo cristiano".
Para Douglas Boin, "los testimonios bíblicos que acusan a los judíos son una distracción que trata de lanzar a los historiadores por el camino equivocado". De nuevo existe un consenso entre los investigadores: si Jesús fue condenado a la cruz, tuvo que ser por los delitos que provocaban un método de ejecución tan extremo: sedición, desafío al poder de Roma, insurrección contra el Estado. Y un gobernante romano como Poncio Pilatos no dudaría un instante en aplicar ese castigo.
El hecho de que, según alguno de los Evangelios, fuese ejecutado junto a ladrones, "podemos hablar también de rebeldes" precisa Savage, no hace más que confirmar esta tesis.
Simon Sebag Montefiore escribe en “Jerusalén. Una biografía”: "Los Evangelios, escritos o enmendados después de la destrucción del Templo en 70, acusan a los judíos y absuelven a los romanos, deseosos de mostrar su lealtad al imperio. Sin embargo, los cargos contra Jesús y el castigo en sí cuentan su propia historia: fue una operación romana".
Fuente: Agencias