Karina, una niña de solo 4 años, fue hallada viva tras pasar sola 12 días en un bosque de Siberia alimentándose de bayas y tomando agua del río, informó el portal RT.
La menor desapareció el 29 de julio. Sin embargo, su madre se percató del hecho recién el 2 de agosto, debido a que asumió que la pequeña estaba con su padre. El progenitor se había ido a una zona incomunicada a apagar incendios forestales.
"Al darse cuenta de que la niña había desaparecido, se inició la búsqueda en la que participaron más de 100 personas, tanto socorristas como voluntarios. Con cada día que pasaba quedaba menos esperanza de hallarla, ya que los socorristas encontraron muchas huellas de osos en la zona", según RT.
Karina se hizo su propia cama con pasto y sobrevivió gracias al calor que le proporcionó su perro. Sin embargo, al décimo día el can regresó a su casa, por lo que las esperanzas de encontrarla con vida se desvanecían.
Dos días después, un perro rastreador, usando las huellas del perrito de Karina, la encontró viva a unos 10 kilómetros de su pueblo. Según los médicos, la pequeña está psicológicamente estable, pese al susto que sufrió.