Monrovia, AP
El gobierno de Liberia impuso una cuarentena sobre el mayor barrio pobre de la capital y decretó un toque de queda nocturno para tratar de frenar el avance del ébola, mientras que Nigeria informó que ya son cinco los muertos en ese país a causa de la enfermedad.
La presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf, ordenó mantener un toque de queda nacional entre las 21:00 y las 06:00 de la mañana en medio de las informaciones sobre cadáveres que son abandonados en la calle en plena noche porque las autoridades no se dan abasto, informaron medios locales.
Además, la mandataria puso en cuarentena el barrio de West Point, donde 37 pacientes escaparon de un centro de aislamiento el pasado fin de semana. En ese barrio viven unas 75.000 personas.
El sábado, un grupo de habitantes de West Point irrumpió en una escuela acondicionada como centro de atención y sacó de allí a los pacientes, quienes habrían estado infectados con ébola. Los afectados fueron encontrados el martes y llevados a otro hospital.
EL ÉBOLA NO SE DETIENE
Liberia registra hasta el momento 834 casos de ébola, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). De estos pacientes, 466 han muerto.
Mientras tanto, Nigeria comunicó la muerte de una quinta persona por el virus. Se trata de la médica Ameyo Stella Adadevoh, que se contagió al tratar a un asesor del gobierno liberiano que viajó a Nigeria pese a estar enfermo. Patrick Sawyer fue la primera persona que murió de ébola en Nigeria.
Adadevoh fue una de las primeras que tuvo contacto con él, indicó el ministro de Salud nigeriano.
En Nigeria hay 15 casos confirmados o bajo sospecha y otros 170 en observación.
La OMS registra hasta el momento 2.240 casos sospechosos o confirmados de ébola y 1.350 muertes, solo en África Occidental. La epidemia actual está causada por el tipo más letal de la familia del virus.
El ébola causa hemorragias masivas y según la gravedad tiene una tasa de muerte que puede llegar al 90%. Se transmite por contacto con la sangre y otros fluidos corporales.