En medio del caos y la tragedia de un ataque de extremistas en un hospital de Kabul, Afganistán, una bebé se convirtió en sobreviviente.
El ataque en una sala de maternidad dejó a 24 personas muertas, incluyendo a 16 madres. Una de las víctimas fue la madre de Amina, una recién nacida que recibió dos balazos en la pierna.
Los médicos pensaron que tendrían que amputarle la pierna, pero lograron salvarla y tienen la esperanza de que un día pueda caminar.
Su padre, testigo de la tragedia, habló con la BBC sobre la pérdida de su esposa y la supervivencia de su hija.