Bogotá. El cabo del Ejército de Colombia, Eduardo Alfonso Ávila Romero, quien perdió sus piernas esta semana a causa de una mina instalada por el ELN, calificó como bajeza que los terroristas hayan mostrado su pierna como trofeo.
Así, el militar pidió que Colombia "despierte y vea la clase de delincuentes que son en realidad" los grupos armados que operan en el país.
Ávila activó esta semana una mina colocada por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el municipio de Convención, departamento de Norte de Santander, cuando trabajaba para retirar explosivos de un terreno en el que instalaban un parque infantil y, posteriormente, los guerrilleros exhibieron una de sus piernas "como trofeo", según denunció la Defensoría del Pueblo.
En una entrevista concedida a Caracol Radio, el militar aseguró que "eso es bueno para que Colombia vea la clase de delincuentes que son" los guerrilleros y, por tanto, la clase de personas "que quieren tener participación política".
Esta cuestión es uno de los puntos ya acordados por el Gobierno con las FARC en los diálogos en Cuba y previsiblemente uno de los temas a tratar con el ELN, la segunda guerrilla del país, que está en "diálogos exploratorios" con el Ejecutivo para abrir también una mesa de negociaciones.
“QUIEREN SEMBRAR TERROR”
Preguntado por la exhibición de una de sus piernas una vez mutiladas, el militar destacó que esa actitud "demuestra la bajeza de los delincuentes, que tienen idea de sembrar el terror, al precio que sea".
En las diferentes entrevistas concedidas hoy, el cabo recordó que se encontraba en un sector de fuerte presencia guerrillera y se mostró satisfecho de que fuese él quien activase el explosivo y no un niño.
En una de ellas, el militar destacó que "algún día habrá paz", si bien apostilló que "no está cerca", porque las negociaciones que desarrolla el Gobierno colombiano con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no son "el camino adecuado".
"Para que haya paz, todo el pueblo debe estar en la negociación, debe conocer al 100 % qué es lo que se negocia y debe ser un diálogo entre delincuentes y Colombia, no entre las FARC y el Gobierno", señaló.
Asimismo, Ávila, de 26 años, destacó que "la paz es de todos y los delincuentes nos han perjudicado a todos", por lo que ahora los grupos guerrilleros que operan en el país tienen que cumplir con los ciudadanos.
Ávila destacó que tiene "el apoyo absoluto" de su familia y explicó que tiene una hija de ocho años que ya conoce su situación como padre. "Ella es muy fuerte y lo entendió", dijo.
Por esta acción que ha sido condenada por diferentes estamentos del Gobierno y la sociedad, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que está en visita de Estado a México, ordenó a los militares "redoblar los esfuerzos" contra el ELN.
En sus primeras declaraciones a los periodistas en México, Santos calificó lo ocurrido como "un acto de barbarie que raya con lo demencial, que debe ser condenado no solamente por los colombianos, sino por el mundo entero".
Fuente: EFE