Dallas (Reuters)
El paciente con ébola que lucha por su vida en un hospital de Dallas, Estados Unidos, está con un respirador y recibe diálisis renal para ayudar a estabilizar su salud, informó hoy la institución.
El liberiano Thomas Eric Duncan, la primera persona diagnosticada con el mortal virus en suelo estadounidense, ha recibido la medicina experimental brincidofovir.
Un hospital en Nebraska indicó que estaba usando el mismo fármaco para tratar a un camarógrafo estadounidense que fue repatriado ayer desde Liberia.
El Texas Health Presbyterian Hospital dijo en un comunicado que la función hepática de Duncan declinó durante el fin de semana.
Aseguró que, aunque ha mejorado desde entonces, "los médicos advierten que esto podría variar en los próximos días".
Las autoridades y la población estadounidense están en alerta desde que se conoció el diagnóstico de Duncan hace más de una semana, que despertó temores de que la peor epidemia de ébola que se recuerda pueda expandirse desde los tres países más afectados: Guinea, Sierra Leona y Liberia.
Duncan, que llegó a Texas a fines de setiembre en un vuelo comercial desde Liberia, lleva en estado crítico desde el sábado.
El camarógrafo que trabajaba para la cadena NBC Ashoka Mukpo es tratado en el Nebraska Medical Center, que ya dio de alta a otro estadounidense que se infectó en África.
El medicamento usado en Dallas y Nebraska, el brincidofovir, fue desarrollado por la empresa Chimerix Inc, con sede en Durham, Carolina del Norte.
La compañía afirma que fue probado en más de mil pacientes sin generar preocupación por su seguridad.
"Decidimos que en la actualidad era nuestra mejor opción de tratamiento", dijo Phil Smith, director médico de la Unidad de Biocontención del Nebraska Medical Center, que consultó con funcionarios sanitarios y farmacéuticos de Estados Unidos antes de tomar la decisión.
Mukpo está experimentando síntomas como náuseas, vómitos y diarrea, informó el centro.
En Washington, el senador Chuck Schumer dijo que las autoridades de salud se están preparando para exigir chequeos más estrictos en los aeropuertos estadounidenses para evitar que el virus se extienda por el país.
Las nuevas medidas podrían incluir analizar si los viajeros tienen fiebre cuando llegan a Estados Unidos desde los países afectados en África Occidental, en vuelos directos o indirectos, señaló Schumer en un comunicado.
Funcionarios sanitarios de Texas informaron que están monitoreando a 10 personas que tuvieron contacto con Duncan y otras 38 que contactaron con este grupo para ver si alguien desarrolla síntomas de la infección, algo que no ha ocurrido hasta el momento.
Esta semana es considerada vital para ver si algunos de los expuestos en Dallas desarrolla el virus que ha matado a más de 3.400 personas desde que el brote fue descubierto en marzo.