El Carnival Sunshine se apresuró a volver al puerto de Charleston, tras quedar atrapado en una tormenta con olas de más de 5 metros de alto (Foto: @Crew Center / Twitter).
El Carnival Sunshine se apresuró a volver al puerto de Charleston, tras quedar atrapado en una tormenta con olas de más de 5 metros de alto (Foto: @Crew Center / Twitter).
Redacción EC

Un viaje vacacional en crucero se convirtió en una terrible experiencia para los 1.040 ocupantes del crucero Carnival Sunshine, luego de que una tormenta sacudiera la embarcación cuando esta se dirigía desde las Bahamas a Carolina del Sur, .

De acuerdo con los reportes de NBC News, la cubierta exterior del Carnival Sunshine no soportó el azote del mar el pasado sábado 27 de mayo. El bar principal se inundó y los pasadizos que daban a las recámaras quedaron llenos de agua. Además, las 14 cubiertas del navío sufrieron destrozos en medio de la noche en el Océano Atlántico.

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El trayecto hacia el puerto de Charleston se hizo interminable para los turistas. En medio del caos se captaron los momentos previos al accidente. “Las botellas de licor saltaron de la barra y se rompieron. Nos dijeron que dejáramos el piano bar porque había licor corriendo por el piso”, dijo en Twitter un tripulante identificado como @flyerscaptain.

Mientras que el pasajero Bill Hassler contó a la CNN que quedó “sorprendido de todavía estar vivo”. Dijo que vio a los demás ocupantes “blancos como fantasmas”. También recordó cómo una ola arremetió contra la ventana de su cabina personal.

Videos al interior del Carnival Sunshine

William Blackburn es otra persona que fue testigo de la complicada travesía en el mar: “Fue aterrador”, dijo.

Él viajaba junto a su esposa y más integrantes de su familia. “Nos quedamos en nuestro camarote y rezamos para que estuviéramos bien”, contó.

Los tripulantes activaron las medidas de emergencia y se pidió a los pasajeros usar los chalecos salvavidas. “Discutimos el hecho de que sería muy improbable sobrevivir en el agua incluso con chalecos salvavidas y dudábamos de que los botes salvavidas pudieran ser lanzados en esas condiciones”, agregó Blackburn.

Los tripulantes captaron cómo la turbulencia arrancó las puertas, muebles y techos de los compartimentos y salas de entretenimiento del crucero.

“No nos tranquilizaron sobre lo que estaba pasando, hacia dónde nos dirigíamos o cuál era el plan. Podrían habernos actualizado y dejarnos saber algo”, dijo Daniel Taylor a la cadena WCIV-TV.

El tripulante criticó abiertamente la falta de preparación del crucero frente a tormentas agresivas de este tipo.

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