Desde que el proceso de impeachment a Donald Trump se oficializó, el mandatario y la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi no habían coincidido en un mismo espacio público, hasta este martes en el discurso del Estado de la Unión que tanta polémica ha dejado.
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Un desaire de Trump al saludo de Pelosi, quien al final rompió el discurso del mandatario y mostró varias caras de desaprobación o silenciosas gesticulaciones de “mentira” mientras el mandatario ofrecía el discurso. El evento de este martes tuvo tantos elementos que, como definió el congresista demócrata Jamie Raskin, estuvo más cerca a un “reality show" que al pronunciamiento de las máximas autoridades políticas de un país.
Sin embargo, este es tan solo el más reciente capítulo en la larga y caótica historia que mantienen Trump y Pelosi desde que el republicano llegó a la Casa Blanca, tras ganar las elecciones del 2016.
Hace mucho tiempo...
Trasladémonos hasta enero del 2007, cuando Nancy Pelosi fue electa por primera vez como presidenta de la Cámara de Representantes.
El Donald Trump de esa época era un hombre más vinculado a la industria de la lucha libre que a la Casa Blanca y simpatizaba más con el lado demócrata que con el republicano. El día en que Pelosi asumió el cargo, el magnate tomó una copia de The New York Times que anunciaba la juramentación y escribió en ella: “Nancy --- eres la mejor. Felicidades. Donald”.
Diez años después, en enero del 2017, Pelosi era jefa de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes y Trump asumía la presidencia de Estados Unidos. Una reunión en la Casa Blanca entre el mandatario y los diferentes líderes del Legislativo permitió un encuentro de ambos en el Salón Oval.
Según contó la misma Pelosi en una conferencia organizada por el Instituto Aspen y el diario The Atlantic, antes de ingresar pensó en qué podía decir el flamante mandatario. “¿Citará la Biblia? ¿Mencionará a los Padres Fundadores? ¿Habrá algo de poesía?", eran algunas de las ideas que cruzaban por su mente, según contó en esa presentación.
Por lo contrario, se encontró a un Trump que intentaba convencer a los presentes de que “había ganado en el voto popular” sobre Hillary Clinton pues, aseguraba, “entre 3 y 5 millones de personas votaron ilegalmente”.
“Señor presidente, eso no es cierto”, dijo Pelosi, saltando incluso el orden correspondiente para pronunciarse en este tipo de encuentros -el presidente y los líderes de la mayoría en el Senado primero, luego los miembros del partido minoritario- y dando inicio a una nueva etapa en su relación.
Amigos y rivales
En marzo de ese año, Pelosi y Trump ya mostraban posturas diametralmente opuestas sobre temas principales como la seguridad fronteriza, migración y el sistema de salud. En este último punto estaba en debate el nuevo acuerdo planteado por los republicanos, llamado Ley de Asistencia Asequible (ACA, por sus siglas en inglés), para sustituir el plan de salud Obamacare.
“Estamos ansiosos por escuchar (a Trump)”, dijo Pelosi a NBC News Monday por esos días. “Siempre queremos trabajar con el presidente, pero mi mensaje al presidente es: ‘Primero no hagas daño’”.
Tres meses después, en abril del 2017, Pelosi estuvo en el programa “The Leak” de CNN, donde el conductor Jake Tapper le preguntó sobre cómo calificaría los 100 primeros días de Trump en el cargo.
“Definitivamente incompleto. Sus 100 primeros días son una lista de promesas hechas y promesas rotas. Comenzó con su promesa sobre empleos y no vemos ninguna ley laboral”, señaló Pelosi.
Desde antes de que Trump asuma la presidencia de Estados Unidos, en el país ya se hablaba de un proceso de impeachment en su contra. Sin embargo, y sorpresivamente viéndolo en retrospectiva, Pelosi era una de las principales voces opositoras a un juicio político.
En mayo del 2017 el exabogado personal del mandatario se declaró culpable de ocho delitos graves y declaró que pagó a dos mujeres para que guardaran silencio sobre asuntos relacionados a Trump “por orden de un candidato para un cargo federal”.
Además, la justicia estadounidense había iniciado un proceso contra el exasesor de Trump, Paul Manafort, en torno a la investigación por la presunta intromisión de Rusia en los comicios del 2016.
Pese a todo ello, Pelosi aseguró, primero a CNN, que su bancada sabía que ella “no estaba de acuerdo (con el juicio político)", algo que reafirmó poco después en una entrevista con AP diciendo que “no es una prioridad”.
“El impeachment debe surgir de otra cosa”, dijo entonces Pelosi.
Presidenta de la Cámara
El 2018 fue un año electoral en Estados Unidos, pues los tradicionales comicios de medio término sirvieron para reemplazar a 35 de los 100 senadores y a los 435 legisladores que conforman la Cámara de Representantes.
El resultado fue un Senado controlado por los republicanos y un Congreso con mayoría demócrata. Pelosi aseguró que con esta victoria buscaría un segundo mandato en la cámara legislativa y su campaña comenzaría de inmediato.
El mismo martes electoral, Pelosi recibió la llamada de Trump, quien le ofreció su apoyo en la candidatura hacia la presidencia en el Congreso.
“Sabes, hablemos, estoy seguro de que podemos llegar a un acuerdo sobre algunas cosas", le habría dicho el mandatario a Pelosi, quien confesó que no escuchó mucho “por toda la gente que se encontraba celebrando la victoria”.
"Tenemos la obligación de tratar de encontrar un terreno común donde podamos hacerlo”, respondió la demócrata a través de una entrevista con el periodista de CNN Chris Cuomo.
Pocos días después, Trump se refirió al tema mientras salía de la Casa Blanca con destino a California, estado en el que nació Pelosi.
“Ayudaré a Nancy Pelosi si necesita algunos votos. Debe necesitar algunos votos. Haré un trabajo increíble para ella”, dijo Trump. “Me cae bien. ¿Pueden creerlo? Me cae bien Nancy Pelosi”.
Antes de que acabe el año, sin embargo, ambos líderes protagonizarían un nuevo momento que marcaría su relación. Este tuvo lugar en diciembre, en plena Oficina Oval, y añadió al hasta entonces presidente del Senado, el demócrata Chuck Schumer.
Pelosi y Schumer habían sido invitados a la residencia presidencial para negociar con Trump los términos sobre seguridad fronteriza y convencerlo de no incluir la construcción del muro en el límite con México dentro del presupuesto federal.
Trump, por su parte, amenazaba al Legislativo de cerrar el gobierno si no aprobaban su presupuesto para el muro.
De repente, las puertas de la Oficina Oval se abrieron y dieron paso a los camarógrafos que esperaban afuera. “Me enorgullece cerrar el gobierno por la seguridad fronteriza”, le decía Trump frente a cámaras a un Schumer que se veía desconcertado.
“Nancy está en una situación sobre la que no es fácil hablar ahora”, decía el gobernante.
“Señor presidente, por favor no caracterice así la fortaleza que yo traigo a esta reunión como líder demócrata en la Cámara, acabamos de lograr una gran victoria”, señaló Pelosi dentro de la discusión que se prolongó por cerca de 10 minutos.
Cabe resaltar que las infructuosas conversaciones entre ambos bandos resultó en un cierre parcial del gobierno que duró desde el 22 de diciembre hasta el 25 de enero del 2019.
Pocos días después de que el Gobierno reanudara sus labores, se llevó a cabo el segundo discurso del Estado de la Unión en la administración Trump, un momento en el que Pelosi también tuvo un papel protagónico.
Cuando el mandatario republicano terminó de hacer un llamado a “rechazar la política de venganza, resistencia y retribución" para dar paso a "abrazar el potencial ilimitado de la cooperación, el compromiso y el bien común”, la ya electa titular de la Cámara de Representantes se levantó para aplaudir y dejar una imagen que se viralizó de inmediato.
Poco después Pelosi dijo que sus aplausos no habían sido sarcásticos. Poca gente le creyó.
Durante todo el 2019, Pelosi y Trump han tenido una serie de calificativos y gestos mutuos que podrían ir en una extensa lista. A continuación, los más destacados:
- Mayo
Pelosi aseguraba que “reza por el presidente y por los Estados Unidos”, luego de que Trump interrumpiera prepotentemente una reunión sobre infraestructura que ella mantenía con el demócrata Schumer.
Poco después, un irónico Trump utilizó su cuenta en Twitter para responder: “Los líderes demócratas están destruyendo a Estados Unidos, pero continuaré estableciendo récords para el pueblo, y Nancy, muchas gracias por sus oraciones, ¡sé que realmente lo dice en serio!”
Pero no quedaría ahí, al día siguiente, durante una conferencia de prensa desde la Casa Blanca, Trump rechazaba los señalamientos y aseguraba que todas eran mentiras de “‘Crying’ Chuck (‘El Llorón’ Chuck Schumer), ‘Crazy’ Nancy (‘La Loca’ Nancy Pelosi)", a quien había “visto desde hace tiempo y ya no es la misma persona”.
A partir de entonces, ‘Crazy Nancy’ fue uno de los insultos más utilizados por Trump para referirse a la presidenta de la Cámara de Representantes.
- Junio
Durante una entrevista en Normandia, Francia, a donde había asistido para la conmemoración del Día D, Donald Trump calificó a Pelosi como una persona “desagradable, vengativa y horrible”. La respuesta de la demócrata llegó durante un evento del Concejo de Relaciones Exteriores celebrado en Nueva York, durante la conversación con el periodista Fareed Zakaria, dijo que “sentía pena" por Trump.
- Setiembre
“Nadie está por encima de la ley”, dijo Pelosi el 24 de setiembre durante la conferencia de prensa en la que anunciaba que daba inicio al juicio político contra Donald Trump tras conocerse el escándalo de supuestas presiones ejercidas desde la Casa Blanca hacia el Gobierno de Ucrania.
- Octubre
Esta fotografía, publicada originalmente desde la cuenta de Twitter de Donald Trump, muestra parte de una tensa reunión que sostuvieron en la Casa Blanca para discutir sobre la salida de militares estadounidenses en Siria.
En la reunión, el mandatario habría calificado a Pelosi de “política de tercera categoría”, mientras que ella respondió que le preocupaba “que con él todos los caminos conducen a Putin” antes de retirarse del lugar.
“Creo que me estaba excusando para salir del salón, pero también le recordaba al presidente los 354 votos contra 60 con los que la Cámara reprobó sus decisiones en Siria", explicó al día siguiente Pelosi. “Si en campaña dijo que traería a todos los soldados a casa, ¿Arabia Saudita es su casa?”.