El presidente de EE. UU., Joe Biden, habla sobre el fortalecimiento de la economía para los trabajadores sindicalizados y los jubilados en el edificio de oficinas ejecutivas de Eisenhower, junto a la Casa Blanca en Washington, DC, el 8 de diciembre de 2022. (Foto de Brendan SMIALOWSKI / AFP)
El presidente de EE. UU., Joe Biden, habla sobre el fortalecimiento de la economía para los trabajadores sindicalizados y los jubilados en el edificio de oficinas ejecutivas de Eisenhower, junto a la Casa Blanca en Washington, DC, el 8 de diciembre de 2022. (Foto de Brendan SMIALOWSKI / AFP)
/ BRENDAN SMIALOWSKI
Agencia AFP

El futuro de y el de están “conectados irrevocablemente”, afirmó este lunes el presidente cuando se cumplen 200 años de relaciones bilaterales, entre tensiones comerciales y una crisis migratoria en la frontera.

El 12 de diciembre de 1822, el diplomático mexicano José Manuel Zozaya y Bermúdez entregó cartas credenciales al presidente James Monroe como enviado ante el gobierno estadounidense tras la independencia de México.

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Desde entonces las relaciones han sufrido altibajos, incluida una guerra (1846-1848).

“No es fácil olvidar las intervenciones militares de Estados Unidos en México y la pérdida de la mitad de nuestro territorio”, afirmó el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador en una carta enviada a su homólogo estadounidense.

Pese a las fricciones se tejieron lazos fuertes.

En un comunicado, Biden aseguró que “como vecinos y amigos” los dos países comparten “un conjunto de valores”, “un compromiso duradero con la libertad, la democracia y el estado de derecho” y “una asociación económica y de seguridad sólida y cada vez más profunda que ha convertido a América del Norte en la región más competitiva y dinámica del mundo”.

“México y Estados Unidos han demostrado que somos más fuertes y más seguros cuando estamos juntos. Nuestros futuros están conectados irrevocablemente”, afirmó.

“Nada está fuera de nuestro alcance si continuamos trabajando juntos”, añadió.

López Obrador anticipó que hará tres peticiones a Biden cuando se reúnan en enero en la Cumbre de América del Norte junto con el primer ministro canadiense Justin Trudeau.

Le instará a “planear la sustitución de importaciones para producir en América del Norte y en todo el continente lo que consumimos, aplicar un programa para el bienestar de los pueblos de América Latina y el Caribe y considerarlos aliados respetando su soberanía”.

Para el embajador mexicano en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, ambos países deben conseguir que la región norteamericana sea “la más competitiva” y “la más humanista del mundo”, afirmó este lunes en un vídeo.

Actualmente los dos países mantienen una buena relación salpicada de tiranteces comerciales, como las surgidas a raíz de la política energética de López Obrador, que Estados Unidos considera que infringe las reglas del tratado regional T-MEC en cuanto a acceso a mercado e inversión.

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El último encontronazo se debió al maíz transgénico, que México prohibió importar para consumo humano a partir de 2024, aunque propuso aplazar un año la prohibición.

La cooperación bilateral es estrecha en temas como la crisis migratoria desatada por la afluencia de cientos de miles de migrantes, en su inmensa mayoría latinoamericanos, que intentan cruzar la frontera hacia Estados Unidos en busca de un futuro mejor.

Además este lunes Biden, de confesión católica, ha destacado que el bicentenario coincide con la festividad de la Virgen de Guadalupe y ha honrado “las muchas contribuciones únicas de los mexicano estadounidenses” durante generaciones.

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