¿Por qué Joe Biden es la gran incógnita del debate demócrata?
¿Por qué Joe Biden es la gran incógnita del debate demócrata?

Washington. Los cinco aspirantes por el Partido Demócrata para las elecciones presidenciales del 2016 en Estados Unidos presentan el martes sus argumentos en el primer debate público de sus campañas, que tiene como gran incógnita la eventual presencia del vicepresidente .


Además de la favorita, Hillary Clinton, el escenario será ocupado por el senador Bernie Sanders, considerado la gran sorpresa demócrata de esta campaña; Lincoln Chaffe, gobernador de Rhode Island; Martin O'Malley, gobernador de Maryland, y Jim Webb, también senador.

Este cuadro difiere radicalmente del presentado en el último debate de los aspirantes por el Partido Republicano, cuyos 15 precandidatos tuvieron que ser divididos en dos grupos (uno de 11 y otro de 4) de acuerdo con los números de los sondeos de opinión.

La gran incógnita del debate de hoy, sin embargo, es el vicepresidente de Estados UnidosJoe Biden, quien aún no ha confirmado si lanzará su candidatura y, por lo tanto, no está invitado al debate, pero que aún así figura en los sondeos de opinión con alrededor del 16% de los apoyos (aunque en algunos estados supera el 20%).

Los principales institutos de sondeos inclusive ya han adaptado sus cuestionarios a un escenario "con Joe Biden" y otro sin la presencia del carismático vicepresidente de Estados Unidos.

Joe Biden tiene casi un 19% de popularidad y está evaluando si presentarse a la carrera por la presidencia de Estados Unidos.

Aunque Joe Biden aún no ha formalizado su precandidatura presidencial, la cadena de TV CNN, que transmitirá el debate, reveló que tendrá listo un sexto atril para ser instalado en caso de que el vicepresidente decida lanzarse al ruedo a último minuto.

Favorita puesta a prueba

Bombardeada de forma incesante por los republicanos y no pocos demócratas por su desempeño como secretaria de Estado de Estados Unidos y el uso de una cuenta de correo electrónico privada en esa función, Clinton será sin dudas puesta a prueba por sus copartidarios.

En especial, Clinton queda bajo fuego generalizado por su gestión política luego de los ataques a la sede consular de Estados Unidos en Bengazi, Libia, en el 2012, y por haber utilizado un servidor personal de correo electrónico cuando era Secretaria de Estado, en lugar de usar el correo oficial, sujeto a escrutinio legislativo.

Sanders, un veterano político con 25 años de experiencia en las dos cámaras del Congreso de Estados Unidos, adelantó que no pretende utilizar el debate para atacar a Clinton. El último sondeo de CBS indica que Clinton tiene el 46% de intención de voto, al tiempo que Sanders aparece con 27%.

No obstante, Sanders adelantó que pretende cuestionar los cambios de opinión de Clinton en temas económicos. "La gente tendrá que contrastar mi coherencia y mi dedicación a enfrentarme a Wall Street y las corporaciones, con la secretaria", dijo el domingo en una entrevista con la red de TV NBC.

Además, pretende recordarle a Clinton que ella, cuando era senadora votó en el 2002 a favor de la intervención estadounidense en Iraq, a la que él se opuso.

Con un discurso claramente de izquierda y una fuente de recursos marcadamente inferior a la de Clinton, Sanders (quien se define como un "socialista democrático") es sin embargo la gran sorpresa de la campaña demócrata para el 2016.

Para Chaffe, O'Malley y Webb, sin embargo, el debate representa la gran oportunidad de contraponer sus propuestas a las de Clinton y Sanders e intentar crecer en los sondeos, ya que aún exhiben índices de popularidad de un dígito.

Fuente: AFP

Contenido sugerido

Contenido GEC