Austin, Estados Unidos (AP)
El portavoz de un hospital en Dallas informó el miércoles que el primer paciente diagnosticado de ébola en Estados Unidos ha muerto.
Wendell Watson, del Hospital Presbiteriano de Salud de Texas, dijo que Thomas Eric Duncan murió el miércoles por la mañana.
Duncan llegó a Dallas 20 de septiembre procedente de Liberia y mostró síntomas de la enfermedad a los pocos días. Fue enviado a casa después de una primera visita a la sala de emergencias, pero regresó al hospital 28 de septiembre y estuvo en aislamiento desde entonces.
También el miércoles, el Departamento de Seguridad Nacional ordenó a sus agentes en aeropuertos y puertos de entrada que examinen a todos los viajeros que entran al país para detectar posibles síntomas de contagio de ébola.
No obstante, no se dieron detalles ni se explicó qué medidas específicas se tomarán.
El subsecretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, informó que agentes de Aduanas y Protección Fronteriza también entregarán a viajeros hojas que detallan los síntomas de la enfermedad para identificarlos e instrucciones para llamar a un doctor si enferman en un plazo de 21 días.
Mayorkas no explicó en qué forma examinarán a las personas ni dijo cuándo comenzarán a aplicarse las nuevas medidas. Indicó que agentes observarán a todos los viajeros por "señales generales de enfermedad" en los puestos de entrada. El funcionario dio una conferencia en el norte de Virginia el miércoles.
El gobierno de Barack Obama ha tenido problemas en semanas recientes para tomar medidas efectivas que les permitan detectar a las personas que llegan y puedan ser portadoras de la enfermedad dado que muchos de ellos podrían no presentar síntomas cuando arriban.
Mayorkas dijo que el Departamento está al tanto de esos temas y que está atendiendo el problema en varios niveles.
El ébola ha causado la muerte de más de 3.400 personas en el oeste de África y hay el doble de contagiados, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud. El virus ha afectado duramente a los trabajadores sanitarios, ya que más de 370 han muerto o caído enfermos en los países más afectados por la epidemia como Liberia, Guinea y Sierra Leona, países que ya sufrían carencia de doctores y enfermeras antes del brote de ébola.