¿Cuál ha sido el destino de los autores de las últimas masacres en Estados Unidos?

El último miércoles, la jueza estatal Elizabeth Scherer condenó a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional a Nikolas Cruz, el autor del tiroteo en una escuela de Parkland, Florida, que dejó 17 muertos en febrero del 2018.

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Cruz, quien el año pasado se declaró culpable de los 34 cargos en su contra -incluidos los imputados por haber causado heridas graves a 17 víctimas- se libró hace un mes de la pena de muerte luego de que 3 de los 12 miembros del jurado encargado de decidir dicha condena alegara que sufre de problemas mentales.

Aunque en su momento que le perdonaran la vida a Cruz suscitó una ola de críticas por parte de varios familiares de las víctimas, esta sentencia ha permitido cerrar un doloroso capítulo que sacudió a la sociedad estadounidense.

Sin embargo, la masacre perpetrada por Cruz es tan solo una de las tantas que se han cometido en escuelas, centros comerciales y calles estadounidenses durante los últimos años.

Según la organización Sandy Hook Promise, se han registrado al menos 2.032 tiroteos en escuelas de Estados Unidos desde 1970.

Gun Violence Archive, una web dedicada a monitorear la violencia armada en dicho país, por su parte, ha reportado 580 tiroteos masivos en lo que va del 2022.

Pero, ¿qué ha sucedido con los responsables detrás de los tiroteos más letales de los últimos años en Estados Unidos?

Escuela primaria Robb, Texas (2022)

El 24 de mayo del 2022, Salvador Ramos (18 años) hirió a tiros a su abuela antes de dirigirse a la escuela primaria Robb, en Uvalde, portando un rifle AR-15 y desatar una masacre.

En total, Ramos estuvo una hora dentro del colegio provocando la muerte de 22 personas e hiriendo a otras 18 antes de que una Unidad Táctica de la Patrulla Fronteriza pudiera frenarlo.

Ramos fue abatido en el lugar por las fuerzas policiales. La tragedia, sin embargo, provocó una serie de críticas por la reacción de las autoridades, que incrementaron luego de que se conocieran grabaciones en las que se evidenció la indecisión de los agentes que le permitió a Ramos cobrarse más víctimas.

El Paso, Texas (2019)

El 3 de agosto del 2019, Patrick Wood Crusius, un estadounidense de entonces 21 años, manejó durante 10 horas desde su ciudad, Allen, hasta El Paso e ingresó armado con un rifle de asalto WASR-10 a un local de la conocida cadena de supermercados Walmart.

Cerca de media hora antes de comenzar a disparar, Crusius publicó en el sitio web 8chan un manifiesto titulado “La verdad incómoda”, donde calificaba a la migración como una “invasión hispana de Texas”.

Los argumentos del atacante son similares a la denominada teoría del “gran reemplazo”, defendida por los grupos supremacistas blancos y neonazis.

El ataque de Crusius dejó 23 muertos, la mayoría de ellos latinos. En su publicación había asegurado que “esperaba matar a la mayor cantidad de hispanos, porque los inmigrantes deben de ser invitados a que abandonen el país”.

Crusius fue detenido por la policía luego de la masacre, no ofreció resistencia y se identificó a él mismo como el autor del ataque.

Actualmente, Crusius enfrenta 90 cargos federales. Está recluido en una cárcel de El Paso a la espera del juicio en su contra, el mismo que se aplazó a causa de la pandemia de COVID-19.

El último miércoles, el fiscal distrital Jaime Esparza aseguró que buscarán que Crusius sea condenado a pena de muerte por sus crímenes.

Sutherland Springs, Texas (2017)

El 5 de noviembre del 2017, el exsoldado Devin Patrick Kelley (26) llegó hasta la Primera Iglesia Bautista del pequeño pueblo Sutherland Springs, de apenas 500 habitantes, armado con un rifle Ruger AR-556 y vistiendo un chaleco antibalas.

Al ser mediodía de un domingo, el templo se encontraba celebrando una liturgia cuando Kelley comenzó a disparar contra los presentes. En total, causó la muerte de 26 personas y dejó a otras 20 personas heridas.

Un vecino del templo logró herir de un disparo a Kelley mientras huía del lugar y comenzó a perseguirlo en su camioneta. El atacante, sin embargo, fue hallado con un tiro en la cabeza luego de una persecución policial.

Las Vegas, Nevada (2017)

La noche del 1 de octubre del 2017 se celebraba en la ciudad de Las Vegas el festival de música country Route 91 Harvest.

Mientras el cantante Jason Aldean se presentaba en el escenario, una serie de disparos se escucharon y desataron el caos entre la multitud.

A 360 metros del lugar donde se celebraba el festival se encuentra el hotel Mandalay Bay. En el piso 32 del edificio, asomado desde dos ventanas, se encontraba Stephen Craig Paddock, un contador de 64 años.

Paddock había roto los cristales de su habitación e instalado dos fusiles semiautomáticos, con los que disparó durante 10 minutos contra la multitud.

Cuando la policía llegó a la habitación encontraron a Paddock muerto, se había suicidado de un tiro. El tiroteo que desató provocó la muerte de 58 personas y dejó a otros 851 heridos.

El ataque de Paddock es considerada la peor masacre en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre del 2001. El grupo terrorista Estado Islámico aseguró que Paddock se había unido a sus filas poco antes y se atribuyó el ataque, pero el FBI aseguró no haber encontrado indicios de que el hombre se haya radicalizado.

Discoteca Pulse, Orlando (2016)

El 12 de junio del 2016 la noche latina del club Pulse se convirtió en una auténtica pesadilla.

Omar Mir Seddique, neoyorquino de 29 años con ascendencia afgana, llegó a la discoteca frecuentada por la comunidad LGBT alrededor de las 2 de la madrugada portando un fusil SIG Sauer MCX y una pistola Glock 17.

El hombre, que luego se descubrió se había radicalizado y unido a las filas del grupo terrorista Estado Islámico, comenzó a disparar contra los asistentes al local dejando un saldo de 49 muertos y 53 heridos.

Ante la llegada policial, Seddique se refugió dentro del local y tomó a 30 personas como rehenes. Tres horas más tarde, un equipo SWAT consiguió ingresar a las instalaciones y abatió al terrorista tras un enfrentamiento a disparos.

San Bernardino, California (2015)

Un evento celebrado en el Centro Regional del Interior del condado de San Bernardino el 2 de diciembre del 2015 fue el lugar de inicio de una letal jornada.

A las 11 de la mañana, dos tiradores llegaron al lugar y comenzaron a disparar contra los casi 100 asistentes. La llegada de la policía provocó la huida de los agresores, a quienes se les perdió de vista por unas 4 horas hasta que dio inicio una intensa persecución.

El vehículo sospechoso respondió con disparos a las advertencias de la policía y menos de un minuto después las dos personas que iban a bordo fueron abatidas. Las autoridades identificaron a los ocupantes como Syed Farook (28) y Tashfeen Malik (27).

Tanto el ataque inicial como los disparos realizados durante la persecución dejaron 14 muertos y 24 heridos. Según el FBI, Farook y Malik se habían radicalizado desde hacía algún tiempo.

Escuela Sandy Hook, Connecticut (2012)

El 14 de diciembre del 2012 se produjo una de las tragedias más emblemáticas de la violencia en las escuelas estadounidense.

La mañana de ese día, Adam Lanza (20) asesinó a su madre, Nancy, antes de dirigirse a la escuela primaria Sandy Hook, en el pueblo de Newton.

Ya en el colegio, Lanza -quien había ido armado con dos pistolas y un fusil automático- comenzó a recorrer los pasillos y las aulas, disparando contra quienes se cruzaban en su camino.

El ataque de Lanza se prolongó por cerca de 40 minutos, provocando 26 muertes, 18 de las víctimas eran niños.

La policía llegó al local, pero antes de conseguir llegar a Lanza el atacante se suicidó de un disparo en la cabeza.

El de Sandy Hook es considerado el tiroteo escolar más mortífero en la historia de Estados Unidos.

Universidad Virginia Tech (2007)

El 16 de abril del 2007 se registró el peor ataque a una universidad en la historia de Estados Unidos.

La tragedia tuvo lugar en la Universidad Estatal de Virginia, conocida como Virginia Tech. El autor fue identificado como Seung-Hui Cho, un surcoreano de 23 años.

Cho, quien creció en Virginia y posteriormente se mudó al campus universitario, pasó varios meses planeando el ataque, según las investigaciones posteriores del FBI.

A las 7:15 a.m. del 16 de abril se escuchó un disparo en los dormitorios de la universidad. Dos horas más tarde, Cho cerró con cadenas las puertas de un pasillo de aulas y comenzó a disparar contra los estudiantes.

El agresor, armado con dos pistolas, causó la muerte de 32 personas e hirió a otras 29 antes de suicidarse al verse rodeado por la policía.