Una pareja de Indiana, Estados Unidos, fue acusada la semana pasada de haber abandonado a una de sus hijas, según informó el medio Washington Post.
Los acusados, Michael y Kristine Barnett, no niegan el abandono. En 2010 adoptaron a Natalia, una chica de seis años de Ucrania. Y en 2014 dejaron a Natalia en un departamento en Indiana y se mudaron con el resto de sus hijos a Canadá. Así lo confirmaron a las autoridades locales.
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¿Por qué abandonaron a Natalia? Kristine, una conocida autora de libros sobre crianza en Estados Unidos, reveló la razón esta semana. Según Barnett, Natalia no era una chica sino “una mujer de 22 años con enanismo”.
"[Natalia] es un adulto y la adopción fue una estafa", dijo Kristine. Michael y Kristine se divorciaron luego de abandonar a Natalia. Antes de irse a Canadá intentaron cambiar la edad oficial de la chica de siete años a 22.
Según declaró Kristine, Natalia es "una sociópata y una psicópata" que estuvo todo el tiempo consciente de lo que hacía. Además, dijo que la chica "quería matar a toda la familia y enterrarla en el jardín de la casa".
El exesposo de Kristine, Michael Barnett, de 43 años, contó una historia diferente a la policía. “Natalia era una menor cuando la abandonamos. Kristine le dijo que le diga a la policía que ella tenía 22 años”, dijo.
Registros policiales indican que la pareja intentó determinar la edad exacta de Natalia en diferentes oportunidades. En 2010, el año de la adopción, un doctor indicó que la chica tenía ocho años y no seis como decía. En 2012, otro doctor indicó que tenía "aproximadamente 11 años".
“Los medios me están mostrando como si hubiera abandonado a un menor. Pero no hay ningún menor en esta historia. Natalia era ya una mujer. Menstruaba, tenía dientes de adulto”, dijo Kristine al DailyMail.
Michael y Kristine Barnett fueron detenidos y liberados luego de pagar la fianza.
Kristine Barnett afirma que Natalia era una persona muy peligrosa y que corrían peligro en todo momento. Esto impidió que puedan dormir con tranquilidad por las noches. Se sentían amenazados de muerte.
“Ella pintó dibujos en los que decía que quería matar a los miembros de la familia, envolverlos en una sábana y ponerlos en el jardín trasero. Se quedaba de pie junto a nosotros en medio de la noche. No se podía dormir. Tuvimos que esconder todos los objetos punzantes. La vi poner químicos, lejía o algo así en mi café y le pregunté, ‘¿Qué estás haciendo?’ Me dijo: ‘Estoy intentando envenenarte’”, contó.
Diferentes medios informaron que Natalia empezó a escuchar voces y a pintar espejos con su propia sangre. Fue en un centro psiquiátrico donde Natalia confesó que no tenía 9 años.
El Hospital Larue Carter en Indianápolis explicó que Natalia reconoció que había intentado asesinar a su familia adoptiva y que no sentía ningún remordimiento. Es más, cometer este crimen le parecía divertido. El psicólogo Andrew McLaren dijo que la joven ucraniana se había dedicado a estafar familias durante varios años.