Presidente del gobierno español celebra “rechazo a la ultraderecha” tras elecciones en Francia

El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, celebró este domingo que tanto Francia como Reino Unido hayan optado por el “rechazo a la ultraderecha y apuesta decidida por una izquierda social”, tras las recientes elecciones legislativas celebradas en ambos países.

“Esta semana, dos de los mayores países de Europa han elegido el mismo camino que eligió España hace un año: rechazo a la ultraderecha y apuesta decidida por una izquierda social”, escribió Sánchez en un mensaje en la red social X.

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Fue en referencia a los comicios legislativos de este domingo en Francia, que proyectan una victoria de la izquierda, y al triunfo del laborismo el jueves en Reino Unido. “Con la ultraderecha ni se pacta ni se gobierna”, agregó.

Con los 577 escaños de la Cámara ya asignados, el Nuevo Frente Popular (NFP) de socialistas, comunistas, ecologistas y la más radical La Francia Insumisa (LFI) quedó en primer lugar con 182 escaños, más otros 13 independientes de izquierda, según los datos oficiales del Ministerio del Interior.

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El bloque macronista, formado por tres partidos, perdió su mayoría al quedarse en 168 diputados, con una caída apreciable respecto a los 250 que tenía, pero mucho menos pronunciada de lo que vaticinaba la primera vuelta.

El tercer puesto fue para la ultraderechista Agrupación Nacional (RN), que partía como gran favorita tras su victoria en la primera vuelta y los pronósticos de los sondeos publicados hasta el viernes, pero que se quedó finalmente en 143 escaños.

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A pesar de este resultado, el RN logra un resultado histórico, muy por encima de los 89 diputados de 2022, que ya supusieron un salto excepcional desde los 8 que tenían en 2017.

En algunas ciudades del país las manifestaciones para celebrar la victoria de la izquierda desembocaron en enfrentamientos con las fuerzas del orden, como en Lyon, Rennes, Lille y Nantes, donde habían sido prohibidas, lo que provocó intervenciones policiales para desalojarlas con gases lacrimógenos.