Berlín. Varios de los monumentos más emblemáticos de Alemania, como la berlinesa Puerta de Brandeburgo o la catedral de Colonia, apagaron hoy sus luces en rechazo a las manifestaciones del movimiento de tinte xenófobo Patriotas europeos contra la islamización de Occidente (Pegida).
Como ya hizo en diciembre la ópera de Dresde, ciudad donde nació Pegida, algunas ciudades han desconectado la iluminación nocturna de sus principales monumentos para mostrar su oposición a las miles de personas que desde hace más de dos meses se manifiestan cada lunes contra la, a su juicio, creciente islamización del país.
Miles de personas salieron, además, a la calle en diversas localidades contra Pegida, que volvió a liderar una gran concentración en Dresde, aunque no ha conseguido que el movimiento prendiera en otras ciudades.
El deán de la catedral de Colonia, Norbert Feldhoff, fue el primero en anunciar que apagaría la iluminación de este monumento histórico y arquitectónico alemán.
Después las autoridades locales y otras entidades, como la Iglesia evangélica, se sumaron a su gesto y desconectaron la iluminación de otros lugares representativos.
El partido de los Verdes había solicitado al Gobierno de la ciudad-estado de Berlín que apagara la Puerta de Brandeburgo y finalmente, después de que la conocida "torre de la televisión" de la capital se quedara a oscuras, la simbólica puerta perdió la luz, al igual que la Columna de la Victoria, en el Tiergarten.
La principal contramanifestación tuvo lugar hoy en Berlín, donde los medios locales estiman que salieron a la calle unas 5.000 personas convocadas por movimientos sociales y por la comunidad turca con respaldo de los sindicatos, los Verdes, la Izquierda y el Partido Socialdemócrata, representado en la marcha por el ministro de Justicia, Heiko Maas.
Según cifras ofrecidas por la policía, unas 5.000 personas también se manifestaron contra Pegida en Stuttgart, mientras que un millar lo hicieron en Hamburgo y unas 800 en Rostock.
Fuente: EFE