Una fotografía tomada el 29 de abril de 2020 muestra al personal médico con equipo de protección personal (EPP) mientras tratan a un paciente infectado con la enfermedad Covid-19 en el Hospital St Janos de Budapest (Hungría). (KAROLY ARVAI / POOL / AFP).
Una fotografía tomada el 29 de abril de 2020 muestra al personal médico con equipo de protección personal (EPP) mientras tratan a un paciente infectado con la enfermedad Covid-19 en el Hospital St Janos de Budapest (Hungría). (KAROLY ARVAI / POOL / AFP).
/ KAROLY ARVAI
Agencia Reuters

La húngara Szilvia Bedo-Nagy se enteró de que había dado a luz a su hija Napsugar cuando salió de un coma inducido, en el cual estuvo por más de un mes. Ella dio positivo por y contraído neumonía.

MIRA: “Hongo negro” mortal se propaga entre víctimas del coronavirus en la India

Tenía un embarazo muy avanzado cuando le diagnosticaron COVID-19 a fines del año pasado y la enviaron a casa a cuarentena. Pero a medida que su condición empeoraba, la llevaron de regreso al hospital.

No podía respirar”, dijo Bedo-Nagy a Radio Free Europe desde su casa en la ciudad rural de Hatvan. “Resultó que era neumonía”.

La trasladaron a Budapest y Napsugar, que en húngaro significa “sol”, nació por cesárea. Bedo-Nagy quedó internada en la unidad de cuidados intensivos con un ventilador, luego un pulmón artificial y, finalmente, en un coma inducido.

Mientras estaba en el hospital, su esposo, Jozsef Bedo, cuidó a su hija, temiendo que su esposa no sobreviviera.

Hungría tiene las tasas de muertes por COVID-19 más altas del mundo por cada 100.000 personas, según datos de la Universidad Johns Hopkins, y en algunos hospitales hasta el 80% de los pacientes con respiradores no sobrevivieron.

Pero alrededor de la época navideña, Bedo-Nagy recibió una llamada de un médico que le informó que habían despertado a su esposa.

El médico dijo que mi esposa estaba tratando de ponerse en contacto conmigo”, contó Bedo. “Al día siguiente fui a visitarla. Estaba despierta y cuando le preguntaba algo me contestaba con la mirada”.

La víspera de Año Nuevo de 2020 fue la primera vez que Bedo-Nagy recuerda haber estado despierta después de su terrible experiencia, pero dijo que aún no sabía lo que había sucedido.

No tenía idea de lo que estaba pasando. Me estaba señalando el vientre para preguntar cuándo di a luz (...), entonces el médico dijo que la bebé había nacido hace un tiempo”.

Su médico, Bela Merkely, dijo que el de Bedo-Nagy era un caso fascinante e inusualmente complicado.

Bedo-Nagy se está recuperando bien en casa junto con su esposo y Napsugar.

VIDEO RECOMENDADO

Valparaíso sufre una tormenta perfecta del coronavirus tras vacaciones
La avalancha de turistas que recibió Valparaíso durante el verano austral generó tras el fin de la temporada una tormenta perfecta en esta región de Chile: un explosivo aumento de contagios de coronavirus, el colapso de hospitales y una economía por los suelos.

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC