“Crimea ejerció su derecho a la autodeterminación”

Para el embajador de Rusia en el Perú, Nikolay V. Sofinskiy, el referéndum en Crimea y la incorporación a la federación ha sido un “acontecimiento histórico” y dentro del marco de los procedimientos democráticos y “sin influencia externa”, según declaró a este Diario.

“El factor que llevó al pueblo de Ucrania a tomar tal decisión ha sido el dramático desarrollo de la situación en Ucrania en el transcurso de los últimos meses. De hecho en el país tuvo lugar un golpe de estado armado. Se puso en el olvido la Constitución en función, y fueron destituidos el presidente y el Gobierno elegidos legítimamente por el pueblo”, señaló Sofinskiy refiriéndose a la ola de protestas que sacudió Kiev desde noviembre pasado y que exigía la salida del presidente Víktor Yanukóvich, un aliado de Rusia. Las violentas manifestaciones terminaron con la huida de Yanukóvich hacia Rusia y la instauración de un gobierno interino de tendencia proeuropea. 

“El poder (en Ucrania) ha sido tomado por fuerzas ilegítimas que se apoyaron sobre acciones forzadas y violentas, aspiraciones nacionalistas radicales y eslóganes abiertamente rusófobos”, añadió el embajador. 

“Ante la amenaza a sus intereses vitales y seguridad sus habitantes, (los crimeos) se dirigieron a Rusia solicitando defender el derecho a la propia vida e impedir el desenfreno de la violencia”, precisó Sofinskiy.

El embajador señala que para Rusia, Crimea “es el pilar de la fe ortodoxa rusa, es la sangre de centenares de miles caídos por su liberación en diferentes guerras. Es la base del espíritu, de la cultura y de la civilización rusa”. 

Pese a la opinión del actual Gobierno de Ucrania y de las potencias de Occidente, que señalan que se ha violado la ley internacional, Rusia sostiene que la decisión de Crimea de anexarse a Rusia “se ejerce en un estrecho seguimiento a las normas internacionales, a la Carta de las Naciones Unidas que declara el derecho de las naciones a la autodeterminación, a la Declaración de 1970 sobre los principios del Derecho Internacional, a la Declaración de 1960 sobre el otorgamiento de la independencia a los países y pueblos coloniales, así como a otros documentos internacionales”, según apunta el embajador. 

“Quiero subrayar que no ha sido Moscú quién inició la ‘cuestión de Crimea’. Rusia de manera franca y sincera aspiraba al diálogo y a la cooperación internacional en todos los asuntos durante todo el período del desarrollo de la crisis ucraniana. De este modo nuestras acciones han sido una reacción natural pero forzada a un juego abiertamente provocativo y ‘de trastienda’ de los socios occidentales”, expresó Sofinskiy.

“Deseamos que Ucrania sea un Estado fuerte, soberano y autosuficiente, para que la paz, la conciliación y el bienestar lleguen a este país. Estamos seguros de que los ciudadanos de Ucrania son capaces de arreglar su propia casa”, finalizó.