El referéndum y la amenaza nuclear contra Ucrania: la espada de Damocles sobre la cabeza de Putin y el mundo

LEE TAMBIÉN | Vladimir Putin dice que conflicto con Ucrania es uno de los resultados del “derrumbe de la Unión Soviética”

Del otro lado, Ucrania y sus aliados de Occidente destacan las irregularidades del proceso que se inició justo cuando su contraofensiva empezó a repeler a los invasores rusos. También denuncian que en las regiones invadidas -que representan cerca del 15% del territorio ucraniano- se reportaron abusos, como grupos armados que entraron a las casas para obligarlos a votar a favor. En esa línea, Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, sostuvo que el plebiscito carecía de legitimidad y era una “flagrante violación del derecho internacional”.

A pesar de las quejas, se espera que hoy Putin anuncie que las zonas en cuestión ya son parte de Rusia. Y, como ya ha quedado claro, el mandatario no aceptará peros: “Si la integridad territorial de nuestro país se ve amenazada, por supuesto que usaremos todos los medios a nuestra disposición para proteger a Rusia y a nuestro pueblo [...] Esto no es un bluf. Y quienes intentan chantajearnos con armas nucleares deben saber que la veleta puede girar y apuntar hacia ellos”. La amenaza se sustenta, calcula la Deutsche Welle, en que el Kremlin maneja el arsenal nuclear “más grande del mundo”, con 6.375 unidades. Estados Unidos cuenta con 5.800.

El último territorio que Rusia se anexó fue Crimea, aunque el panorama del 2014 es muy diferente al actual. “La invasión y apropiación no se dio en un escenario de operaciones militares de gran magnitud -dice el especialista en seguridad y coordinador del World Political Analysis Laboratory, Rubens de S. Duarte-. Pero en Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia todavía hay disputas, la guerra continúa. A pesar de las quejas, Crimea ya es rusa, así que valdría pensar que, de igual forma, será muy difícil que Ucrania recupere estas cuatro regiones”.

MIRA: Los rusos no quieren ir a la guerra: así es el éxodo a países fronterizos para escapar de los cuarteles

Aun así, Duarte anota que la anexión no da por concluida la guerra. “El Kremlin la sostendrá en tanto hayan personas que se defiendan y no acepten la invasión. Mientras existan dos lados dispuestos a pelear, habrá conflicto”.

Para el especialista, en todo caso, la anexión responde a dos objetivos. El primero es que Rusia se legitime ante la comunidad internacional y doméstica. El éxito en las urnas demostraría que las regiones en cuestión quieren integrarse, lo que apoyaría la narrativa de Moscú: hay ciudadanos rusos que viven en peligro y constante amenaza de grupos fascistas, y es su deber liberarlos y protegerlos.

“También se esconde una meta militar. Según la doctrina militar rusa, sus fuerzas aéreas están autorizadas a usar armas nucleares cuando su territorio es invadido. En el momento en que tropas extranjeras ataquen suelo ruso, que la contraofensiva avance, ellos pueden responder de esa manera. Tienen un argumento legal”, explica.

MÁS EN MUNDO: Ciudadanos rusos huyen a Finlandia por temor a encontrar una frontera cerrada para siempre

La cuestión nuclear

Vladimir Putin se podría dirigir al mundo el viernes para celebrar los resultados del referéndum y ufanarse de la victoria, pero organizarla también puede ser visto como debilidad. Para Duarte, la consulta revela que Rusia busca “otros medios para ganar la guerra, ya no solo militarmente sino política, económica y culturalmente”. Digamos, el fracaso del supuesto poderío de su armada.

¿Y la amenaza nuclear? También debe ser vista con escepticismo, aunque jamás dejando de lado sus posibles consecuencias nefastas. El especialista dice que, en la historia de la humanidad, solo se usaron en dos ocasiones y ambas en la Segunda Guerra Mundial. Después, su uso fue descartado. De allí que el mismo Putin haya puesto sobre su cabeza (y la del mundo) la espada de Damocles.

“Los países suelen tener armas nucleares, pero no las usan y muy probablemente nunca las usarán porque el costo político es muy alto. Emplearlas haría que el mundo se una en contra de ellos debido a su gran poder destructivo”.

MIRA: Papa Francisco revela que intercedió con Rusia para llevar a cabo liberación de prisioneros ucranianos

Y no solo eso. Duarte anota que, actualmente, estas también vienen en dispositivos pequeños conocidos como armas nucleares tácticas, que, según CNN, jamás fueron usadas en combate.

El medio explica que están “diseñadas para usarse en un campo de batalla limitado”, es decir, para “destruir una columna de tanques, portaviones”, etc. Estas manejan explosivos de entre 10 a 100 kilotones de dinamita, cifra que cobra perspectiva al recordar que las bombas usadas en las ciudades japonesas, Hiroshima y Nagasaki, contenían 15 y 21, respectivamente.

TAMBIÉN EN MUNDO: Finlandia aprueba el “cierre completo” de sus fronteras a los turistas rusos

“Si bien Rusia solo advirtió usarlas en Ucrania -agrega Duarte-, la verdad es que no pueden controlar la radiación. Esta se mueve de acuerdo a la dirección del viento, por lo que es imposible prevenir que llegue a países vecinos o a la misma Rusia, y causen problemas de salud, destruyan algunas regiones y contaminen el suelo”.

“Creo que es muy poco probable que las usen, justamente porque el costo es muy alto. Hoy por hoy, Rusia tiene aliados, pero los podría perder. Aun así, es una amenaza. Habrán los que prefieran dar un paso al costado, lo que daría cuenta de su capacidad disuasiva”.