Roma. El ministro de Interior italiano, Matteo Salvini, aseguró que no dejará atracar en ningún puerto del país al barco "Mare Jonio", del proyecto Mediterranea Saving Humans y con bandera italiana, y que rescató a 50 migrantes este lunes en el Mediterráneo Central.
El barco italiano que pertenece a este proyecto de vigilancia en el Mediterráneo, al que pertenece también la ONG Open Arms, informó del rescate de 50 personas, entre ellas 12 menores, que se encontraban en un bote neumático a 42 millas de las costas de Libia.
La diferencia con otros casos en los que ONG han rescatado a migrantes en el Mediterráneo es que en esta ocasión el barco lleva bandera italiana y por tanto Salvini no puede apelar a la responsabilidad de otros países.
Al respecto, el ministro envió durante la noche una directiva a las fuerzas del orden y seguridad italianas en las que indicaba que "quien auxilia migrantes irregulares en aguas que no son de responsabilidad italiana, sin que Roma haya coordinado la intervención, viola el orden y la seguridad del Estado italiano".
Salvini confirmó hoy en declaraciones al canal televisivo de noticias "Skytg24" que "los migrantes no podrán un pie en Italia".
Atacó a la tripulación del barco "por no haber obedecido a las autoridades, por haber decidido de manera autónoma dirigirse a Italia solo por motivos políticos ya que lo más cercano era Libia".
Explicó que se les dará comida y la ropa que necesiten, pero que el Ministerio del Interior no autorizará nunca el desembarco.
Asimismo aseguró que esta organización "ayuda a quienes gestionan el tráfico de seres humanos".
Sobre las condiciones de los migrantes, la ONG dijo que se ha pedido que sea traslado urgentemente a un hospital uno de los migrantes que se encuentra en peor estado.
La ONG explicó que las personas a bordo habían estado en el mar durante casi dos días y, aunque las condiciones de salud son bastante estables, todas están muy cansadas y con problemas de deshidratación.
Visto el estado del mar y la llegada de una tormenta, el barco pidió acercarse a Italia y se le concedió aproximarse a Lampedusa.
"Hemos pedido formalmente a Italia, nuestro Estado de bandera y el Estado bajo el cual la responsabilidad es legal y geográfica, indicar un puerto de desembarque para estas personas", añadieron.
Por su parte, el alcalde de Lampedusa, Toto Martello, pidió que se deje desembarcar a estos migrantes en el puerto de su localidad y acusó que en estos meses han seguido desembarcando personas sin que el Ministerio del Interior dijese nada.
Fuente: EFE