Sao Paulo, EFE
La bolsa de Sao Paulo, principal plaza de América Latina, mantuvo las ganancias a media sesión animada por la intención de la presidenta Dilma Rousseff de adoptar nuevas medidas económicas antes de que finalice el año.
El índice Ibovespa, principal indicador del parque bursátil paulista, subía un 2,88% a las 13:30 hora local (15:30 GMT) y se situaba en los 51.958 puntos, después de las turbulencias vividas la víspera durante la primera sesión tras las elecciones del domingo, en las que Rousseff fue reelegida.
El lunes la bolsa paulista llegó a caer más de un 6% y cerró con una bajada del 2,77%, hasta situarse en los 50.503 puntos, su peor nivel desde abril, como muestra de rechazo a la política intervencionista de la mandataria.
La situación se calmó este martes después de que la jefe de Estado se comprometiera a implementar una reforma para recuperar la economía y reforzar el combate a la inflación.
"No voy a esperar la conclusión del primer mandato para iniciar todas las acciones necesarias para transformar y mejorar el crecimiento de la economía", dijo al admitir su preocupación con las bajas tasas de crecimiento económico y la elevada inflación.
Las acciones de la petrolera estatal Petrobras, las más castigadas la víspera, subían un 4,55 %, mientras que sus ordinarias avanzaban un 3,95%.
Los papeles ordinarios de Eletrobras y Banco do Brasil también recuperaron parte de las pérdidas del lunes y escalaban un 2,23 % y 5,61%.
En el mercado de cambio, el real brasileño se apreciaba un 1,78% frente al dólar, moneda que a media sesión era negociada a 2,479 reales para la compra y 2,481 reales para la venta en el tipo de cambio comercial.
El lunes la moneda estadounidense cerró negociada a 2,526 reales para la venta, su mayor nivel desde el 2005.