Río de Janeiro, DPA
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, aseguró hoy que la sociedad brasileña será informada sobre la red de corrupción que operó durante varios años en el ente estatal Petrobras, del cual se habrían desviado millonarias sumas para alimentar campañas políticas.
"No voy a dejar piedra sobre piedra", dijo la mandataria, quien el domingo conquistó un nuevo periodo de gobierno en el balotaje al imponerse al socialdemócrata Aécio Neves. Las declaraciones fueron hechas durante el programa "Jornal Nacional", de la TV Globo.
"Haremos un combate sin tregua contra la corrupción. Nuestro país no puede mantener la impunidad de aquellos que cometen actos de corrupción. Yo no solo hablé durante las elecciones (sobre corrupción), sino que, pueden estar seguros, haré lo posible para aclarar lo que sucedió en este caso en Petrobras. No voy a dejar piedra sobre piedra", aseveró.
Las denuncias partieron de un ex director de la estatal, quien asegura que se sobrefacturaron contratos, sobre los cuales se pagaban sobornos a legisladores, ministros y gobernadores, y se financiaron varias campañas políticas, principalmente del Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff.
"Yo creo que Brasil tiene una democracia fuerte y una institucionalidad fuerte. La sociedad exige una actitud que interrumpa la sistemática impunidad que ocurrió en nuestro país. Le duela a quien le duela", enfatizó.
Tal como lo hizo poco después de conocer el resultado de las urnas, en el que se impuso por muy estrecho margen a su adversario, la presidenta pidió unión en pos de intereses nacionales.
"Ahora es la hora de que todos nos unamos para garantizar un futuro mejor para Brasil".
Similares palabras pronunció antes de dar estas declaraciones, en entrevista concedida al informativo central del canal Record.
"Hablamos de unión y no de unidad perfecta de ideas", aclaró.
"Hubo algo común entre la gente (que votó el domingo): La búsqueda de un futuro mejor para Brasil. Esa búsqueda es la gran base para que tengamos una unión. (...) La gran palabra en este momento es 'diálogo' con todas las fuerzas productivas", agregó.
También se refirió al "mensaje" que a su entender dejaron las urnas.
"Creo que el mensaje de las urnas es el mensaje del cambio. La gente defendió un cambio por lo mejor para Brasil", dijo la política del Partido de los Trabajadores (PT), en entrevista concedida al informativo central del canal Record.
La mandataria izquierdista conquistó su segundo mandato al recibir unos 54,5 millones de votos, que representan el 51,64% de los votos válidos y suponen una ventaja de unos 3,5 millones de sufragios sobre el político del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).