La Habana, EFE
Las FARC admitieron hoy en La Habana que sus acciones han afectado a población civil a lo largo del conflicto colombiano a pesar de que no ha sido "blanco principal ni secundario" de esta guerrilla, y reiteraron que asumirán la responsabilidad que le concierne ante las víctimas.
"Somos conscientes de que no siempre los resultados de nuestras acciones han sido los previstos o esperados por las FARC-EP, y asumimos sus consecuencias como no puede ser de otra manera. Las FARC-EP asumiremos la responsabilidad que nos concierna", asevera un comunicado divulgado hoy por el equipo de paz de la guerrilla.
La declaración, leída por el guerrillero 'Pablo Atrato' ante medios de prensa, sostiene que "es evidente" que como guerrilla las FARC han "intervenido de manera activa" e "impactado al adversario y de alguna manera afectado a la población que ha vivido inmersa en la guerra".
"Reconocemos explícitamente que nuestro accionar ha afectado a civiles en diferentes momentos y circunstancias a lo largo de la contienda", añade.
En el mismo texto las FARC aclaran que la población no ha sido "blanco principal ni secundario" de sus acciones, y puntualiza que, en los casos en que sus guerrilleros incumplieron las normas y causaron "daños intencionales" a civiles, se han adoptado "medidas sancionadoras" a los responsables.
"Nos hacemos expresamente responsables de todos y cada uno de los actos de guerra ejecutados por nuestras unidades conforme a las órdenes e instrucciones impartidas por nuestro mando y asumimos sus derivaciones", apunta la guerrilla.
Con estos pronunciamientos, los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desarrollaron hoy el conjunto de "propuestas mínimas" que han presentado a los medios en las últimas semanas a propósito de la discusión del tema de las víctimas del conflicto en los diálogos de paz.
El Gobierno colombiano y las FARC iniciaron en agosto pasado la discusión de ese asunto, cuarto punto que aborda la mesa tras lograr preacuerdos en los temas de tierras, participación política y drogas ilícitas.
El proceso de paz colombiano cumplirá dos años en noviembre próximo y tiene sede permanente en La Habana.