Murió Gabriel Enrique González Cubillos, el hombre que asesinó a su hijo en Colombia

En extrañas circunstancias murió Gabriel Enrique González Cubillos, el hombre que asesinó a su hijo Gabriel Esteban Cubillos en un hotel de Melgar, Tolima, en Colombia, en octubre del año pasado.

Según el reporte del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), el condenado por el delito de homicidio agravado falleció “a las 20:30 horas de este lunes”.

MIRA: Conmoción en Colombia por asesinato de niño Gabriel Esteban: “su compañerito de carpeta, llora y llora”

Además, el médico tratante informa que fue por paro cardiorespiratorio. El sujeto se encontraba en UCI por su intoxicación desde el 26 de marzo del 2023 a las 21:30 horas.

Según la información preliminar, el condenado a 45 años de prisión, habría muerto por una sobredosis de medicamentos. Gabriel Enrique González Cubillos fue trasladado en horas de la noche del domingo 26 de marzo al hospital Federico Lleras Acosta de Ibagué, donde falleció.

El asesinato de Gabriel Esteban se produjo el 3 de octubre de 2022. El crimen despertó repudio nacional no solo por el asesinato de un menor de edad, sino porque se probó que el homicidio del niño por parte de su padre se hizo para generar dolor y sufrimiento a su expareja.

Gabriel Cubillos llevó a su hijo hasta un hotel en Melgar con la promesa de pasar un tiempo juntos, pero allí acabó con su vida. Este hombre dejó una USB con dos videos en donde explicaba a su expareja las supuestas razones para asesinar al niño.

En uno de los videos le reprochaba muchas cosas acerca de su relación y de las causas del fin de la misma y en el otro le advertía cuáles eran sus macabros planes con el niño, le decía que lo iba a asesinar.

Por otra parte, Gabriel Enrique González dejó una carta a su familia quienes residían en la localidad de Kennedy, en la que le aseguraba a su hermana que nunca más los volverían a ver.

Luego de asfixiar a su hijo, este hombre de 50 años le envió una fotografía a la madre del menor, en la imagen se observaba el cuerpo del niño sábanas blancas y atrás una corona, símbolo del hotel. “No sufrió. Ahora sí puedes disfrutar sola con Edilson y Wesly sin tricitico y mucho menos yo. Felicidades”, decía el mensaje.

Cuando las autoridades arribaron al lugar encontraron el cuerpo sin vida de Gabriel y luego se enteraron de que el padre había escapado en horas de la mañana sin dejar rastro.

Tras su captura, un juez de ejecución de penas le impuso una condena de 45 años por los delitos de homicidio agravado en menor de edad y secuestro.