Un episodio tan insólito como increíble le sucedió a un periodista chileno en plena transmisión en vivo, cuando fue víctima de un robo de carácter muy particular, en el que el ladrón literalmente se fue volando botín. El caso fue que, mientras el reportero hablaba a la cámara en vivo, un pájaro se posó sobre su hombro y un instante después le sacó al hombre el auricular de su oreja y se perdió en el cielo con el aparato en su pico. “¡Se robó el audífono el loro!”, dijo el cronista, sorprendido y entre risas.
Pero una de las cosas que el hombre no sabía es que el loro no era específicamente un loro, sino un ejemplar de un ave conocida como “cotorra argentina”.
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El risueño hecho de inseguridad le ocurrió a Nicolás Krumm, un periodista del canal Chilevisión, del vecino país, que transmitía para el noticiero del mediodía. Casualmente, el reportero estaba dando una noticia sobre el robo de una vivienda cuando se ve en el video que un ave desciende y se apoya sobre su hombro izquierdo.
De inmediato, el cronista señala el pájaro al camarógrafo, pero casi en el mismo instante el ave se inclina hacia la oreja del periodista, le saca el auricular y se va volando. Segundos después, Krumm se da vuelta, mira al cielo y repite, incrédulo: “¡Se robó el audífono el loro!”.
Según contó tiempo más tarde el reportero en un informe sobre el robo del loro en su mismo canal, él no se encontraba en pantalla al momento en que aparece el pájaro, sino que en la televisión estaban pasando imágenes de apoyo. Por eso se permitió hacer el gesto de señalar al animal cuando lo notó sobre su cuerpo.
“Siento algo en el hombro y me doy cuenta de que es un loro. Trato de advertirle al camarógrafo, más que nada porque era un detalle pintoresco”, cuenta el hombre, que dice también que el animal había estado posado sobre una reja cercana. “Hace rato nos estaba mirando el loro”.
Pero en el informe de la televisión chilena dieron una precisión sobre la verdadera clasificación del animal. El loro en cuestión, no era un loro, sino una cotorra argentina -Myiopsitta monachus-, que, según narró el académico veterinario Cristóbal Briceño, seguramente había tenido un pasado con una familia humana, ya que estos animales, cuando son silvestres, no suelen cometer este tipo de acciones.
“Posiblemente haya tenido un dueño que la haya tenido enjaulada y se haya escapado y que por esa razón tenga un nivel de confianza mayor con una persona”, dijo el académico.
Finalmente, hay que decir que la historia tuvo un final feliz. Krumm y el camarógrafo, luego de cumplir con su tarea para el noticiero, se pusieron a buscar el auricular en las inmediaciones, y lo encontraron en un lugar cercano. “Finalmente lo logramos encontrar. Justo el camarógrafo, por suerte, gran valor, lo encontró en el pasto y pudimos salvar el audífono”, dijo el cronista.
El ave, en tanto, no pudo volver a ser hallada. “El loro sigue prófugo, ese es el tema”, bromeó Krumm.