Una escapadita romántica a la estatua del Cristo Rey, ubicada en el cerro Los Cristales, occidente de Cali, Colombia, terminó con la carrera criminal de uno de los capos mexicanos más buscados por agencias federales antimafia de Estados Unidos.
El sujeto, de 39 años y conocido con el alias de Pitt, llegó a Colombia en febrero pasado y se movía entre Medellín y Cali negociando con las disidencias de las Farc toneladas de cocaína para el ‘cartel de Sinaloa’.
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En la mafia todos sabían que sus patrones son directamente familiares de Joaquín el ‘Chapo’ Guzmán y el escurridizo, poderoso y viejo capo Ismael el ‘Mayo’ Zambada García, a quien agentes de la DEA no han podido capturar.
Por eso, ‘Pitt’, de contextura gruesa y 1 metro 78 centímetros de estatura, se convirtió en una especie de ‘reyezuelo’ en Cali.
Aunque ingresó al país el 18 de febrero pasado, por Bogotá, se movía por el Valle –en carros blindados, con un séquito de escoltas–, por bares y lujosos restaurantes. Y, los fines de semana, bajaba al Cauca e incluso hasta Nariño a negociar los embarques de cocaína.
“Es el enlace más importante de las Farc de ‘Iván Mordisco’ y ‘Gentil Duarte’ con el ‘cartel de Sinaloa’. Compraba cocaína en el sur del Valle, Cauca y Nariño con la columna ‘Dagoberto Ramos’, la ‘Carlos Patiño’ y la ‘Jaime Martínez’ “, aseguró el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas.
La foto clave
“Cuando regresaba a Cali, se encontraba con frecuencia con una modelo rubia que lo acompañaba durante varias noches en el apartamento que alquilaron en un lujoso condominio, en el barrio Ciudad Jardín”, afirmó uno de los investigadores del caso.
Y agregó que, rompiendo todos los protocolos de seguridad (incluido el uso de aplicaciones, con claves cifradas), un día feriado la modelo lo convenció de ir al cerro Los Cristales, en donde, además, se dejó tomar varias fotografías besando a su acompañante.
La rubia subió casi de inmediato la imagen a su cuenta de Facebook.
Y en cuestión de horas, agentes de la DEA le informaron a la Policía Antinarcóticos de Colombia que ‘Pitt’ es realmente el mexicano Brian Donaciano Olguín Verdugo.
Además, que las cámaras de seguridad del aeropuerto José María Córdova, que sirve a Medellín, lo habían captado con otra atractiva mujer.
Con esa información, oficiales de inteligencia colombianos empezaron a seguir a ‘Pitt’.
Luego de cerca de 14 días de vigilancia, se establecieron sus rutinas, contactos y hasta el número de escoltas que lo cuidaban, armados hasta los dientes.
La vigilancia
También se cotejaron los exóticos tatuajes en los brazos y abdomen de ‘Pitt’ –que aparecen reportados en la circular roja de la Interpol–, que quedaron registrados en las fotografías que agentes encubierto le hicieron al capo en los seguimientos que realizaron en Colombia.
EL TIEMPO conoció videos y fotos en los que se ve al mexicano en compañía de la modelo, en la habitación principal del lujoso condominio.
Esto implicó que, durante semanas, agentes encubierto permanecieran en un apartamento cercano, haciendo labores de vigilancia.
De hecho, las fotografías de identificación se lograron obtener cuando el emisario del ‘cartel de Sinaloa’ salía a fumar al balcón y a dar instrucciones a sus enlaces a través de una aplicación cifrada.
La DEA y la Policía Antinarcóticos pudieron documentar las negociaciones que estaba adelantando para enviar embarques de cocaína por Centroamérica con destino final a Estados Unidos.
Parte de su misión en Colombia era garantizar la pureza del alcaloide y definir si pagaba los alijos en efectivo o con armas.
“Reyezuelo y Príncipe”
EL TIEMPO estableció que ‘Pitt’ es oriundo de Culiacán (Sinaloa) y que aparece con un proceso civil abierto en el juzgado sexto de Tijuana, sur de California.
Pero, al otro lado de la frontera, una corte del distrito sur de California (Estados Unidos) lo procesa por ser una de las fichas claves de la nueva estructura del ‘cartel de Sinaloa’.
“Esa organización criminal se reestructuró tras la captura de Joaquín el ‘Chapo’ Guzmán y la fluida colaboración que le entregó a la DEA Vicente Zambala Niebla, ‘Vicentillo’ o el ‘Príncipe del cartel’ “, le aseguró una fuente en México a este diario.
’Vicentillo’ es el hijo consentido del ‘Mayo’, que, tras una nutrida colaboración con la justicia de Estados Unidos, ya se encuentra en libertad en ese país.
Tras ese golpe al cartel, que incluyó la entrega de identidades de decenas de sus narcotraficantes, se empezó a reclutar a gente como alias Pitt, el ‘reyezuelo’ en Cali hasta el viernes, primero de abril, cuando fue capturado.
Soborno y abogados
‘Pitt’ ostenta tal poder en México que les dijo a los uniformados colombianos que lo capturaron, que si estuviera en su país, un escuadrón armado lo habría liberado en segundos. Y les ofreció un soborno de mil millones de pesos si lo dejaban en libertad.
Así lo confirmó el propio general Vargas, quien no dudó en calificar este operativo de captura como uno de los golpes más importantes al narcotráfico: “Creemos que este resultado es el más importante en términos de capturas de los delegados de carteles de México que vienen a delinquir con narcotráfico de las Farc en el Cauca”.
Y aunque sus escoltas mexicanos estaban en la zona, vigilando movimientos extraños de la Policía en el sector, no alcanzaron a reaccionar.
Este diario estableció que un oficial de inteligencia se hizo pasar por el portero del condominio y le dijo a ‘Pitt’ que la presencia de un grupo de personas en la cuadra obedecía a una visita de rutina.
Pero realmente era el dispositivo de agentes de la Policía Antinarcóticos que tenían ubicadas las coordenadas en donde se encontraba el mexicano y el tiempo exacto para extraerlo de allí sin que su guardia personal reaccionara.
Cuando ‘Pitt’ estaba colgando el citófono del apartamento, aparentemente tranquilo por el parte del portero, la Policía ya estaba entrando en el lujoso predio y leyéndole la orden de captura con fines de extradición, emanada de una corte federal.
Ahora el mexicano permanece en calabozos de la Dijín, con un esquema de seguridad reforzado, mientras una oficina de abogados intenta interponer los recursos legales necesarios para evitar su extradición.
EL TIEMPO estableció que, en 2018, el mexicano ya había estado en Colombia en una corta temporada; y en junio de 2020 regresó al país.
Al parecer, en ese momento, en plena pandemia, estaba estableciendo los contactos con las disidencias de las Farc.
Además, se estableció que estuvo varios días en Lima (Perú) antes de aterrizar en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, desde donde ahora saldrá el avión de la DEA que lo llevará a California (Estados Unidos) directo a una celda de máxima seguridad.
En Culiacán la noticia apenas ahora se está divulgando.
Allí, alias Pitt era reconocido por ser el propietario de una cadena de supermercados. Pero ahora ya está notificados de que era, ni más ni menos, el emisario del poderoso ‘cartel de Sinaloa’ en Colombia.
En la mafia de México, la captura desató nerviosismo porque no se descarta que alias Pitt siga los pasos de ‘Vicentillo’ y empiece a delatar, no solo a los socios y ubicación de sus patrones y aliados, sino también a sus contactos mafiosos en Colombia.
Los mexicanos están en Colombia
Los carteles de droga mexicanos hacen presencia en Colombia desde hace varios años, tal como lo reveló EL TIEMPO en 2020 y 2021.
Emisarios de estas organizaciones no solo llegan para comprar droga y exportarla hacia Centro y Norteamérica, sino que también estarían detrás de amenazas a la población, vacunas, limpieza social y asesinatos en departamentos como Cauca, Putumayo, Caquetá, Antioquia y Córdoba. Incluso envían agrónomos para que verifiquen y garanticen la pureza del alcaloide.
Además, hace menos de un mes se conoció que en Venezuela aterrizaron mensajeros de los carteles de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa, para negociar una tregua entre las disidencias de las Farc y el Eln, debido a que los violentos enfrentamientos en la región de Apure, frontera con Colombia, están afectando sus operaciones criminales.