"A la prensa la están matando de a poquitos en Venezuela"
"A la prensa la están matando de a poquitos en Venezuela"
Redacción EC

 
NIKITZA CANO SEMINARIO
 

El diario más antiguo de , “El Impulso” (110 años), estuvo a punto de dejar de circular ayer al no tener acceso a papel para imprimir. Pero un recurso de último momento les dio un respiro. Esta es la entrevista el presidente del diario, Carlos Eduardo Carmona.


— ¿Cuál es la situación actual?
La industria editorial está en estado de coma en Venezuela. Tenemos problemas de suministros de todo tipo.  El gobierno ha dejado de pagar a muchas empresas, entre ellas las periodísticas. Se estima que deben 50 millones de dólares, según los reclamos. Eso ha traído la suspensión de las líneas de crédito. 

— ¿Cómo empezó esto?
Tenemos 105 periódicos, 85 de ellos compraban el papel a tres empresas que se corrían los riesgos del tipo de cambio. Recuérdese que tenemos cuatro tipos de cambio. Además, el gobierno exigía 14 documentos al día para que las empresas periodísticas continúen trabajando y tuviesen así el derecho a un cambio preferencial. Pero ese mercado se cayó de la noche a la mañana cuando el gobierno decidió no pagarle más a la industria papelera. No hubo más proveedores, ni crédito...

— ¿Qué hizo el gobierno?
El gobierno tenía el complejo editorial Alfredo Maneiro, el  cual se encargaba de abastecer a los periódicos del Estado. Por poner una cifra, trabajaban con 500 toneladas de papel mensual y de pronto el gobierno le dijo que atienda a todo el mercado nacional porque se iban a cerrar todos los periódicos. Entonces, empezaron a importar 5 mil toneladas mensuales y con eso, actualmente, tratan de abastecer al mercado. Eso es una locura, cómo una sola organización es la única autorizada para traer el papel para todos los periódicos.

—Han llegado a un acuerdo...
Para no cerrar el lunes [ayer], compré un lote pequeño que me permita subsistir ocho días.

— ¿Después qué hará?
Ver la continuidad del abastecimiento de papel, porque de qué nos sirve que nos pongan un curita para una herida con veinte puntos de sutura.   Esto es una emergencia y estamos tratando de apagar incendios.

— ¿Qué solución plantea?
Yo solo pido que me dejen trabajar, que traigan papel, que me quiten el control de cambio y nos dejen comprarlo como lo hacíamos antes. Yo no puedo hacer mi pedido, cuando la industria está colapsada, cuando se está vulnerando derechos fundamentales de mi pueblo. Yo no puedo decir que es más importante la prensa que la comida, si estamos en guerra está claro que tenemos que sobrevivir. A la prensa la están matando de a poquitos.

— ¿Cuántos trabajadores tiene y qué pasará con ellos?
Tenemos 270 trabajadores directos, 40 agentes de ruta, 1.000 puestos de venta y aparte los pregoneros. 

— ¿Habrá recortes?
Acá en Venezuela, no hay sustitución de puestos. Solo es válido si la persona se retira voluntariamente. Tenemos lo que se llama inamovilidad laboral. Es decir que no se puede despedir al empleado por más que se porte mal. Entonces, como empleadores lo que hacemos es calificar a los trabajadores mediante informes que van el Ministerio de Trabajo y ahí empieza un proceso de evaluación. Eso ha aumentado el ausentismo laboral. La productividad laboral está por el suelo.

—Tania Díaz, presidenta de la Comisión Permanente de Poder Popular y Medios lo acusó de tener reservas de papel y que solo sale a chantajear al gobierno...
A nadie le gusta que le llamen chantajista. Yo no discuto con damas por principios. Creo que la señora se equivocó de sujeto en la oración. Yo no soy un chantajista, sino soy un chantajeado. Yo tengo documentos que prueban que me contestó una secretaria de Maneiro, tras muchos intentos de comunicación fallidos, y me dijo “No sé si su pedido se ha hecho, no sé cuándo llegue el barco, pero cuando lo señalen, nosotros le avisaremos”. Una empresa no puede trabajar con una respuesta de ese tipo. Eso a mí me indigna. Yo solo digo que me dejen trabajar.

No solo somos un medio, somos varios que dicen “No me atienden”. El presidente Maduro anunció la creación de dos periódicos estatales hace un par de días. ¿No es irónico? Fue como si contara un chiste en un velorio. Es inapropiado su anuncio cuando la industria nacional le dice que estamos en emergencia. 

Contenido sugerido

Contenido GEC