Santos sobre atentados en Bogotá: "Todo apunta al ELN"

Bogotá. La evidencia "apunta" a que la guerrilla ELN, en conversaciones preliminares de paz con el gobierno de Colombia, es responsable de las dos explosiones que dejaron 10 heridos leves la víspera en Bogotá, informaron las autoridades, que este viernes reforzaron la seguridad de la capital.

En una alocución desde la presidencial Casa de Nariño, flanqueado por altos funcionarios civiles y militares, el mandatario Juan Manuel Santos aseguró que todo "apunta a que los responsables (de los atentados) sean del ELN (Ejército de Liberación Nacional)", segundo grupo insurgente de este país sumido en un conflicto armado de más de 50 años.

"Son hechos que lo que buscan es generar miedo, generar terror, hechos de terrorismo. Las hipótesis sobre por qué estos hechos son varias: presionar la mesa de negociación con los grupos al margen de la ley, el aniversario del ELN, y puede ser también presionar para acabar las negociaciones", dijo Santos tras un consejo extraordinario de seguridad.

El jueves se registraron dos explosiones en la capital colombiana, en el centro financiero y en una zona industrial. Las detonaciones dejaron 10 lesionados, ninguno grave, y daños materiales.

Los atentados ocurrieron en sedes del fondo de pensiones y cesantías Porvenir, propiedad del conglomerado de entidades financieras del magnate colombiano Luis Carlos Sarmiento, y adelantaron el regreso de Santos desde Perú, donde participaba en la X Cumbre de la Alianza del Pacífico.

Santos recordó este viernes que en el último año se han producido en Bogotá siete atentados similares, de los que seis fueron atribuidos al ELN, fundado por campesinos y líderes estudiantiles el 4 de julio de 1964.

Poco después, en la noche del viernes, estallaron dos petardos panfletarios en el centro de Bogotá, con propaganda alusiva al ELN.

En la reacción la policía capturó a un hombre que habría participado en la detonación de los artefactos propagandísticos, según confirmó en rueda de prensa el comandante de la policía nacional, general Rodolfo Palomino.

El ELN sostiene desde comienzos del 2014 diálogos preliminares de paz con el gobierno, sin alcanzar hasta ahora un acuerdo para instalar una mesa de negociación paralela a la que existe desde noviembre del 2012 en Cuba con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), principal guerrilla del país. 

Hasta ahora, el ELN, con unos 2.500 combatientes frente a los cerca de 8.000 de las FARC, no ha reivindicado los atentados.

Seguridad reforzada

Santos informó que se están "reforzando las medidas de seguridad" en la capital para evitar otros hechos similares.

Igualmente recordó que "en el pasado reciente se han evitado cinco o seis de estas acciones" y pidió la colaboración de la ciudadanía y los medios de comunicación para dar con los responsables y evitar el pánico.

El gobierno ofreció una recompensa de unos 38.000 dólares por información para capturar a los autores, mientras continúan las investigaciones, que incluyen análisis de videos de seguridad y retratos hablados de testigos.

En Bogotá, urbe de ocho millones de habitantes, se incrementó la presencia de uniformados: en todas las vías de acceso a la capital se veían efectivos de la Policía Militar, mientras que en las principales avenidas había retenes policiales, constató un fotógrafo de la AFP.

La Alcaldía informó que fueron instalados 24 puestos de control en la ciudad, y desplegados 2.000 militares y más de 500 policías.

Sin embargo, en las redes sociales o en unidades de transporte público se generaron durante el día varias alarmas por la supuesta presencia de paquetes sospechosos o por la divulgación de mensajes que advertían de presuntas amenazas de atentados en lugares públicos.

Ante esta situación, el ministerio de Defensa emitió un comunicado para hacer "un llamado a la calma" y pedir a quien tuviera "información y sospechas de hechos delictivos" entregarla a las autoridades y "no hacerla circular en redes sociales, para no causar pánico".

A fines de marzo, la Policía de Colombia anunció la desarticulación de una banda criminal que había hecho estallar explosivos en distintas zonas de Bogotá para el ELN en semanas anteriores. 

En los meses previos a esa acción policial, se habían presentado media docena de ataques con explosivos en la ciudad, que dejaron al menos una decena de heridos y daños materiales, y muchos de los cuales fueron atribuidos a esa guerrilla.

Las explosiones de bombas han sido una de las más dramáticas manifestaciones de la conflagración interna colombiana, que ha involucrado a guerrillas, grupos paramilitares, agentes del Estado y bandas narcotraficantes, dejando al menos 220.000 muertos, según cifras oficiales.

Fuente: AFP