Montevideo. Yamila tenía apenas 15 años y era la penúltima de los 12 hijos de Juan Carlos Rodríguez (55). La hija más grande tiene 37 años y el menor, 13. La familia Rodríguez llegó al barrio Kennedy, Uruguay, hace 20 años.
Yamila Rodríguez fue asesinada. Su cuerpo se halló decapitado y mutilado el pasado lunes a las afueras de la localidad de Punta del Este. Se reveló que le propinaron un fuerte golpe en la cabeza y que en esos momentos se encontraba en casa de su hermana.
Según relataron expertos de la Policía científica que lleva el caso, en una de las habitaciones de la casa de la hermana de Rodríguez, donde la joven solía pernoctar, se encontraron varios rastros de sangre y signos de que un cuerpo había sido arrastrado por el lugar, sangre que se comprobó pertenecía a la víctima.
Las manchas de sangre habían sido lavadas y un colchón había desaparecido de la habitación, si bien los forenses pudieron identificar los rastros al usar un producto químico que reveló la presencia de los mismos.
Este avance en las investigaciones, en un caso que mantiene en vilo a todo el país, se produjo mientras la Justicia tomaba declaración a las seis personas que hasta el momento han sido detenidas por los hechos, dos de las cuales ya fueron liberadas, aunque quedaron emplazadas para que vuelvan a declarar cuando lo solicite el juez.
Las dos personas liberadas, un hombre de 38 años y una mujer de 18, habían sido las últimas personas a las que se vio en compañía de la víctima.
Entre los detenidos, permanecen dos mujeres de 19 años y dos hombres de 24 y 32 años.
El médico forense Gustavo Ventura expuso más detalles del caso, como que se encontró semen en la vagina de Rodríguez, quien fue asesinada hace unos 7 días, si bien no había señales de violación.
Además, apuntó que la joven fue mutilada, le falta el brazo izquierdo, y decapitada una vez muerta.
"No fue una sierra. Fue un corte perfecto. Bien delineado. Cortó los músculos al ras, al mismo tiempo", relató en declaraciones a la radio local.
El cuerpo de la víctima, desnudo, fue localizado ayer martes por la policía uruguaya a unos 800 metros de donde horas antes se encontró su cabeza, en una zona apartada de Punta del Este, el principal centro turístico de Uruguay.
Rodríguez, que faltaba desde hacía diez días de su casa tras asistir a una fiesta el 2 de noviembre, presentaba un corte profundo en el abdomen y estaba en avanzado estado de descomposición.
La víctima vivía en un asentamiento marginal denominado barrio Kennedy y era la penúltima de una familia con 12 hijos.
Fuente: EFE