(Foto: AFP)
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Redacción EC

El ex ministro de Relaciones Interiores de , apresado la víspera por miembros del servicio de inteligencia que dirigió, podría ser enjuiciado por los delitos de instigación a la rebelión y espionaje, anunciaron el miércoles miembros de su organización y familiares.

A casi 24 horas de su captura, el mayor general retirado Miguel Rodríguez Torres, ex jefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) —la policía política venezolana— permanecía incomunicado, indicó su padre, Jorge Rodríguez.

"No somos ni terroristas ni somos violadores de la constitución ni estamos buscando el poder por un golpe de Estado", expresó en conferencia de prensa Rodríguez al rechazar la acusación que el gobierno realizó la víspera contra su hijo, quien fue señalado de promover "acciones contra la paz" y participar en supuestos complots para atentar contra la unidad de la fuerza armada.

Tras denunciar que el ex ministro y su familia eran víctimas de una "persecución" desde hace varios meses, el también ex alcalde del Alto Apure y disidente del oficialismo instó al presidente Nicolás Maduro y al ministro de la Defensa, general en jefe Vladimir Padrino López, a garantizar la seguridad de Rodríguez Torres.

"Si algo le pasa al mayor general, ellos dos son los responsables", enfatizó.

Por su parte, Indira Urbaneja —miembro del opositor Movimiento Amplio Desafío De Todos que dirige el ex ministro— dijo a la prensa que tenían información de que Rodríguez Torres, de 54 años, habría sido apresado en base a una orden de captura del 27 de junio del año pasado en la que se le señala por los delitos de "espionaje y de instigación a la rebelión", que según las leyes militares implican sanciones de más 20 años de cárcel.

Las autoridades hasta el momento no han ofrecido comentarios sobre los delitos por los que sería procesado Rodríguez Torres, que dirigió el Ministerio de Relaciones Interiores entre los años 2013-2014.

Familiares y miembros del movimiento opositor se trasladaron a la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), en el este de Caracas, para constatar si el ex ministro se encuentra detenido en esa instalación militar, cuyos accesos fueron bloqueados el miércoles por militares con armas largas.

Urbaneja dijo, al leer un comunicado del movimiento opositor, que el arresto de Rodríguez Torres es un "intento desesperado" de las autoridades para "frenar" el llamado Frente Amplio Venezuela Libre que creó la semana pasada la coalición opositora con organizaciones civiles y disidentes del oficialismo para enfrentar al gobierno de Maduro y exigir elecciones libres en el país suramericano.

La detención del ex ministro, que fue por varios años un estrecho colaborador del fallecido presidente Hugo Chávez, a quien acompañó en el fallido golpe de 1992, coincidió con el proceso que abrieron el pasado fin de semana las autoridades militares a seis tenientes coroneles, un primer teniente y dos sargentos que estaban detenidos desde inicios de mes por integrar un supuesto grupo rebelde en la fuerza armada.

Algunos medios locales señalaron que uno de los tenientes coroneles procesado por el caso de rebelión fue subalterno de Rodríguez Torres.

El ex oficial de la Aviación Carlos Hurtado, miembro del movimiento opositor, descartó que el ex ministro tenga relación con ese caso, y dijo a The Associated Press que a pesar de que Rodríguez Torres salió hace tres años del Ejército, donde sirvió por más de 34 años, aún mantiene un liderazgo en el cuerpo castrense.

La ministra de Servicio Penitenciario, Iris Valera, defendió el proceso contra su ex colega, y dijo en su cuenta de Twitter que Rodríguez Torres era una "vergüenza" para la fuerza armada.

"Se dio el lujo de admitir en un hecho público, notorio y comunicacional sus vínculos con la CIA", indicó Valera al señalar al ex ministro de tener supuestos vínculos con el asesinato de miembros del grupo pro oficialista "5 de marzo".

Desde hace un par de años, Rodríguez Torres se separó del oficialismo y pasó a formar parte de un grupo de disidentes, cada vez más creciente, que integra la fiscal general destituida, Luisa Ortega Díaz; el ex embajador y ex ministro de Petróleo, Rafael Ramírez; la ex defensora del pueblo, Gabriela Ramírez, los ex ministros Jorge Giordani, Héctor Navarro, y Ana Elisa Osorio, y varios generales retirados y congresistas.  

Fuente: AP

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