México. El gobierno de México dijo este lunes que deportó a 98 migrantes centroamericanos tras el fracasado e inesperado intento de unos 500 de ellos de cruzar la frontera con Estados Unidos y ser repelidos con gases lacrimógenos y balas de goma.
"Son 98 personas las que fueron puestas a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM) y han sido deportadas", dijo a la cadena Televisa Gerardo García Benavente, comisionado de la autoridad migratoria.
El domingo México ya había anunciado que iba a deportar a migrantes que intentaron cruzar ilegalmente hacia Estados Unidos.
"El Instituto Nacional de Migración (INM) va a actuar y proceder a la deportación inmediata de personas" que participaron en estos altercados, afirmó el domingo en entrevista con Milenio TV Alfonso Navarrete, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob).
De acuerdo con el ministro, un grupo reducido de alborotadores llevó a varios contingentes, en las ciudades de Tijuana y de Mexicali, en Baja California, a separarse de un grupo de varios centenares que este domingo se dirigía pacíficamente a la garita de El Chaparral, en la frontera de Tijuana con San Ysidro.
En grupos pequeños, decenas de migrantes de la caravana se desviaron de la ruta prevista, burlaron un cerco policial y trataron de trepar el muro fronterizo por varios puntos, siendo repelidos por la policía fronteriza estadounidense con gas lacrimógeno.
"A las gentes que hemos identificado como personas violentas que rompieron el orden legal mexicano se procederá, conforme a la ley y a la Constitución, respetando todo derecho que tengan" pero con "firmeza", indicó Navarrete, que lamentó que estos "provocadores" convencieran a mujeres y niños migrantes a participar en los sucesos.
Además, explicó que en un principio la marcha en Tijuana de los migrantes tenía que suponer un "acto ordenado" y convenido con el gobierno del vecino del norte, donde buscan pedir asilo.
Pero algunos grupos actuaron "de forma violenta e intempestiva", lo que llevó a la patrulla fronteriza de Estados Unidos a usar gas lacrimógeno.
"Tenemos certeza de que no hay una sola persona herida por arma de fuego", indicó el secretario, que señaló que están en comunicación con Estados Unidos, país que ante "un intento violento dio una repuesta muy agresiva".
Navarrete aseguró que buena parte de los migrantes ya se han replegado y muchos de ellos habían regresado al albergue que los acoge en Tijuana.
Ante estos sucesos, buscarán reforzar varios puntos fronterizos con mayor presencia de fuerzas de seguridad federal, agregó.
Por su parte, después de este hecho el Gobierno de Estados Unidos decidió cerrar el puerto fronterizo de San Ysidro, entre San Diego y Tijuana.
Varias caravanas migrantes cruzan estos días México para llegar a Estados Unidos. En total se calcula que son al menos nueve mil, si bien cerca de 1.900 fueron regresados a su país voluntariamente, según un boletín publicado hoy por el Instituto Nacional de Migración (INM).
Miles de ellos se encuentran ya en la fronteriza ciudad de Tijuana a la espera de poder pedir asilo a Estados Unidos, ante la atenta mirada del jefe de la Casa Blanca, Donald Trump, totalmente opuesto al fenómeno.
Fuente: EFE