Sídney. Las autoridades de Nueva Zelanda elevaron hoy el nivel de alerta al máximo nivel tras el ataque en dos mezquitas en el que han muerto al menos 49 personas y otras decenas han resultado heridas en Christchurch.
Las fuerzas de seguridad han ordenado el cierre de todas las mezquitas del país por seguridad, mientras que todos los colegios y edificios públicos de Chrischurch, en la Isla Sur, también se encuentran clausurados.
"Esto solo puede ser descrito como un ataque terrorista", afirmó la primera ministra, Jacinta Ardern, en una comparecencia retransmitida en directo desde Wellington, en la Isla Norte.
Ardern informó de que cuatro personas fueron detenidas y tres permanecen bajo custodia policial, incluido un sospechoso nacido en Australia.
Los asaltantes causaron fallecidos en la mezquita de Al Noor y otros muertos en el Centro Islámico Linwood en un ataque dirigido contra inmigrantes y musulmanes, según la Policía.
La mandataria neozelandesa calificó el ataque de "extrema ideología y extrema violencia" y señaló que no tiene "precedentes" en Nueva Zelanda, un país que describió como diverso y abierto.
Ardern afirmó que los cuatro detenidos, que están siendo interrogados por la policía, no estaban fichados y se encontraban "fuera del radar" de los servicios de inteligencia.
Los agentes encontraron artefactos explosivos en los vehículos y uno de los asaltantes fue identificado como Brenton Tarrant, un australiano originario del estado de Nueva Gales del Sur, según indicó una fuente policial australiana a la televisión TVNZ.
Los ataques se produjeron a primera hora de la tarde en las dos mezquitas situadas en el centro de Christchurch, la mayor ciudad de la Isla Sur del país.
Uno de los tiroteos fue retransmitido en directo a través de las redes sociales por uno de los asaltantes, que aparece con ropa militar dentro del centro de culto disparando a bocajarro a varias personas con un arma automática de la que cambió el cargador al menos dos veces.
En las redes sociales también circula un manifiesto de los asaltantes que incluiría calificativos peyorativos contra los musulmanes.
"Es claramente un supremacista blanco el que ha planeado esto durante dos años", dijo un analista en seguridad a la emisora Radio New Zeland.
Fuente: EFE