Jerusalén/Quito (Agencias)
El Gobierno Israelí afirmó que responderá con fuerza ante cualquier ataque en Jerusalén, donde las fuerzas de seguridad reforzaron su presencia un día después de que un palestino embistiera su auto contra el paradero de un tranvía y matara a un bebe de tres meses.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, advirtió que cualquier intento de atentado en Jerusalén será "severamente castigado", al tiempo que calificó el hecho como una acción terrorista.
"Jerusalén unida era y será la capital de Israel por toda la eternidad", aseguró Netanyahu.
Este atentado -el segundo realizado por un palestino a bordo de un vehículo en menos de tres meses- dejó seis personas heridas, entre ellas la ecuatoriana de 22 años, Karen Mosquera, quien sufrió heridas de gravedad, según la cancillería ecuatoriana.
El Gobierno de Ecuador expresó hoy su rechazo enérgico al atentado del miércoles e informó que su legación en Israel ha sido instruida para prestar todo respaldo a la familia de la joven.
Mosquera era oriunda de la ciudad de Guayaquil pero trabajaba en Israel. Según la Cancillería de Ecuador, se encontraba "culminando su proceso de conversión al judaísmo".
El palestino responsable del hecho falleció el jueves, luego que un policía israelí baleara al joven, identificado como Abed Abdelrahman Shaludeh, cuando intentaba huir a pie luego de atropellar a las personas que se encontraban esperando al tranvía.
El bebe fallecido tenía nacionalidad estadounidense, informó el Departamento de Estado. A su funeral asistieron cientos de personas, incluyendo el presidente israelí Reuven Rivlin, quien expresó sus temores por un nuevo estallido de violencia. "Las incitaciones crecientes al odio en las calles del mundo árabe y en las calles de Jersualén son susceptibles de destruir el frágil equilibrio que prevalece en esta ciudad, y arrastrarnos a todos en una ola de destrucción y dolor", declaró Rivlin.
Disturbios
Las fuerzas de seguridad israelíes reforzaron su presencia en las calles de Jerusalén, después de una noche de incidentes, sobre todo el lanzamiento de piedras por parte de jóvenes en Jerusalén Oriental, donde vivía el palestino que cometió el ataque.
"La policía de Jerusalén subraya que aplicará tolerancia cero ante todo tipo de incidente violento y que detendrá a todo aquel que altere el orden público de la ciudad", dijo la policía en un comunicado.
La tensión latente que hay en Jerusalén oriental se agravó en los últimos meses tras el secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes y de un joven palestino poco después, actos que culminaron con la guerra en la Franja de Gaza. Algunos barrios registran enfrentamientos cotidianos entre policías y palestinos.