La británica iraní Ghoncheh Ghavami, detenida el pasado 20 de junio por pedir que las mujeres puedan asistir a encuentros deportivos cuyos participantes sean hombres, fue condenada a un año de prisión en Irán, divulgaron hoy medios locales.
Ante esto, el Reino Unido se mostró preocupado por la condena de Ghavami a 12 meses de prisión, por “propaganda contra el estado”, según afirmó el Ministerio de Exteriores británico en un comunicado.
La mujer, una abogada de 25 años, fue detenida durante una protesta al lado del estadio iraní de Azadi, donde se llevaba a cabo un partido de voleibol masculino que según las ordenanzas ella no podía presenciar.
Aquel día, la detuvieron pero fue liberada rápidamente con la condición de que tenía que regresar luego para recoger sus documentos. Sin embargo, la encarcelaron el día que volvió por sus cosas.
Se le adjudicó el cargo de "propaganda contra el gobierno" y fue encarcelada en la prisión de Evin. Esta cárcel es conocida como la ‘Universidad de Evin’, por la gran cantidad de intelectuales que alberga.
Según indica la agencia AFP el juicio se celebró el mes pasado.
El primer ministro británico, David Cameron, insistió durante un encuentro con el presidente iraní, Hasan Rohani, en setiembre sobre "el impacto que este tipo de casos pueden tener sobre la imagen de Irán en Gran Bretaña".