El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, controlado por el chavismo, anunció en la madrugada del lunes que el presidente Nicolás Maduro ganó la reelección con más del 51 % de los votos, causando gran sorpresa y serias sospechas de fraude tanto dentro del país como en gran parte de la comunidad internacional, que exige una revisión completa de las actas electorales. Incluso nueve gobiernos de América Latina han pedido una reunión urgente del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para que emita una resolución “que salvaguarde la voluntad popular”.