Quedan menos de 100 días para las elecciones presidenciales en Venezuela. El último fin de semana, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), coalición que agrupa a la mayoría de partidos opositores, aprobó de manera unánime la candidatura de Edmundo González Urrutia para enfrentar al chavismo, una misión sumamente compleja a la luz de las trabas que ha colocado el régimen de Nicolás Maduro a sus contrincantes en toda consulta popular desde el 2013.
González Urrutia, en todo caso, puede exhibir que fue presidente de la Mesa de la Unidad Democrática, reemplazada posteriormente por la PUD, y que fue asesor en la única gran victoria electoral opositora en las elecciones para la Asamblea Nacional (Parlamento) a comienzos del 2015.
El fin de semana circuló un corto video del político venezolano Leopoldo López —alguna vez la cara más visible de la oposición, que incluso purgó años de cárcel por ello y que pudo instalarse en España tras ello— en el que él y unos amigos se dirigen a Nicolás Maduro en medio de risas: “Edmundo, pa’ todo el mundo”, “El 28 de julio a votar en total unidad” y “Maduro, se te vino el mundo encima”, le advierten con sorna en alusión al candidato de la mayor plataforma opositora.
El diplomático Edmundo González Urrutia ha pasado de ser un postulante inscrito "por si acaso" a última hora a fines de marzo al mayor enemigo a batir por el oficialismo luego de la declinación de Manuel Rosales, el otro candidato de cierto peso. Este hombre, quien fue embajador en Argelia y Argentina, nunca antes compitió por un cargo de elección popular. El pasivo de ser un desconocido se convertiría en activo, según algunos analistas, por el muy bajo nivel de rechazo que despierta y por la posibilidad de crecimiento que tiene.
Estas dos miradas optimistas pelean contra la realidad de un régimen chavista que se aferrará al poder y que debe estar afilando sus zarpazos contra González Urrutia. Ya se han creado cuentas falsas en las redes para ridiculizar al nuevo contrincante, quien tiene el aval de María Corina Machado, por ahora el más firme impulso para los tres meses intensos que vivirá hasta los comicios. Machado ganó de forma abrumadora las elecciones primarias opositoras en octubre del 2023 pero está inhabilitada debido a una leguleyada del tribunal electoral y a su sustituta, Corina Yoris, tampoco se le dio luz verde.