De detenciones a una ley contra el fascismo: las nuevas maniobras del régimen de Maduro contra la oposición

MIRA: Bloqueos y candidaturas de repuesto: las opciones y retos de la oposición en las elecciones contra Maduro

La Comisión de Política Interior del Parlamento, controlado por el chavismo, prepara un proyecto de ley contra “traidores a la patria”, informó el miércoles el diputado Diosdado Cabello, presidente de esa comisión y número dos del régimen.

La iniciativa fue propuesta en marzo por el presidente del Legislativo, el oficialista Jorge Rodríguez, quien propuso crear una ley para que “los delitos contra la soberanía” sean “severamente castigados”, haciendo alusión a quienes mostraron una posición crítica sobre el referendo celebrado en diciembre sobre la controversia con Guyana por el territorio del Esequibo.

También afirmó que los “traidores” han “convocado a invasiones, a violencia” y “al asesinato del presidente de la república”.

Cabello, por su parte, no dio detalles, pero explicó que el proyecto de ley se basa en el artículo 130 de la Constitución, que establece “el deber de honrar y defender a la patria” y de “proteger la soberanía, la nacionalidad, la integridad territorial, la autodeterminación y los intereses de la nación”.

No es la única iniciativa que impulsa el régimen. El martes, el Gobierno presentó ante el Legislativo el ‘proyecto de ley contra el fascismo, neofascismo y expresiones similares’, elaborado por orden de Maduro.

El proyecto, que fue presentado por la vicepresidenta Delcy Rodríguez e incluye cuatro capítulos y 30 artículos, establece “medios y mecanismos para preservar la convivencia pacífica, la tranquilidad pública, el ejercicio democrático de la voluntad popular, el reconocimiento de la diversidad, la tolerancia y el respeto recíproco, frente a agresiones de orden fascista”.

Al defender el proyecto de ley, Rodríguez afirmó que “sectores extremistas” amenazaron la seguridad y el futuro del país con las protestas antigubernamentales ocurridas en el 2014 y el 2017.

Añadió que dichos sectores pretenden “asaltar el poder político” de Venezuela, que celebrará elecciones presidenciales el 28 de julio.

El régimen apuesta por estos proyectos de ley en momentos en que la campaña electoral entra en una fase decisiva y que las encuestas dan a Maduro un apoyo del 20%. En abril las candidaturas presentadas -13 en total- podrán ser ratificadas, impugnadas y los candidatos reemplazados en algunas circunstancias.

José Carrasquero, analista político venezolano experto en campañas electorales, considera que el chavismo está arreciando sus medidas para entorpecer el proceso electoral porque saben que en unas elecciones libres no tienen opción.

“Estos proyectos de ley están dirigidos contra la oposición. Como no son precisamente demócratas, necesitan de alguna manera entorpecer el proceso electoral, tratando de que para el exterior parezca una elección competitiva y justa, cuando no es así”, dice a El Comercio.

Señala que estas leyes son un mecanismo para “generar miedo y paralizar a la gente” pues buscan que la ciudadanía tenga miedo de expresarse en las redes sociales. “Estas leyes sirven como referencia para saber por qué te van a meter preso”.

Luego de que se bloqueara la candidatura de Machado y su candidata sustituta, Corina Yoris, los ojos están puestos en dos de los opositores que lograron inscribirse.

De un lado, Manuel Rosales, gobernador del estado de Zulia y líder del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), se inscribió a última hora bajo la consigna de que la oposición no debía quedarse sin participar. Del otro, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora, postuló “provisionalmente” al exembajador Edmundo González Urrutia.

En medio de la incertidumbre, Machado insiste en apoyar a Yoris como su candidata, lo que significa que las próximas semanas serán cruciales para alcanzar acuerdos.

Para Carrasquero no hay duda que el régimen intentará presionar más a la oposición en lo que queda de campaña. “Definitivamente habrá más detenciones, el régimen quiere tener a la gente a raya. Si meten preso al segundo de María Corina entonces qué queda para los ciudadanos”.

La propia Machado alertó el miércoles a un grupo de países sobre el riesgo de ser detenida, al tiempo que pidió “extremar los recursos diplomáticos” para que los acuerdos sobre garantías electorales suscritos por el régimen sean cumplidos.

“Actualmente, mis equipos en todo el país corren el riesgo de próximas desapariciones forzadas y yo misma podría ser objeto de una detención injustificada”, aseguró la exdiputada en una carta dirigida a 18 países de América, Europa y África, así como al alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.

Carrasco ve poco probable que el régimen inicie una ola de anulaciones de las candidaturas porque “la mayoría de los postulantes que quedan son controlados por su gobierno”. Sin embargo, no descarta que Maduro invalidé la candidatura de Rosales si lo considera una amenaza.

“Si lo hace, sería muy grosero, pero es una posibilidad si se ve acorralado. Hay que tener en cuenta que si Maduro sale del poder las probabilidades de que vaya preso son muy altas”, afirma.

Agrega que el panorama en la oposición mayoritaria aún es poco claro y que todo va a depender de la capacidad de los integrantes de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora, para ponerse de acuerdo. “Ellos pueden con el apoyo de la comunidad internacional lograr movilizarse. Lo que Maduro sabe es que cualquier candidatura apoyada por María Corina Machado lo va a derrotar”, concluye.