Hace casi dos semanas se llevó a cabo el primer reencuentro familiar virtual de una persona desaparecida durante el período de violencia (1980-2000) que fue hallada con vida después de 34 años. Esta persona desapareció cuando tenía tan solo 14 años de edad y logró rehacer su vida en Brasil. Este caso nos permite reflexionar sobre los derechos y las obligaciones que tienen los Estados frente a las personas desaparecidas y sus familiares. No debemos olvidar que la desaparición de una persona impacta no solo en la víctima directa, sino también en su entorno, y que este impacto se prolonga en el tiempo, suspendiendo también el proyecto de vida de sus seres queridos.
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