La apuesta del Perú por el libre comercio y la integración con la economía mundial ha logrado grandes resultados: las exportaciones se multiplicaron siete veces en las últimas décadas y se pasó de uno a tres millones de empleos generados. De estos, dos millones provienen de exportaciones no tradicionales. Estas, a su vez, pasaron de US$2.057 millones (2000) a US$13.823 millones (2019).
El libre comercio permite invertir, crecer, producir más y vender nuestros productos al mundo. De hecho, gracias a este crecieron las exportaciones regionales y somos líderes mundiales en exportación de arándanos, quinua, paltas, espárragos, pota, castañas y otros. Importamos productos a precios competitivos, accediendo a bienes de capital e insumos en favor de la industria. Nuestros ciudadanos eligen libremente una mayor variedad de productos de distintos países. Incluso, la importación ha impulsado la creación de 35.066 mypes importadoras.
Lamentablemente, el COVID-19 sacudió nuestras exportaciones: en el 2020 cayeron 15%. Solo la agroexportación soportó el golpe (segundo sector exportador después de la minería) con un crecimiento del 7,5%.
Pero el comercio exterior se está recuperando. En el período enero-mayo 2021, las exportaciones crecieron 42,7% versus el mismo período del 2020. Algunos sectores ya superaron los niveles de envíos prepandemia. A China, por ejemplo, crecieron 23% respecto al 2019, destacando minería, pesca y agroexportación.
El comercio exterior es un motor para la reactivación económica, dinamiza la producción descentralizada, genera empleo formal, emprendimientos e inversiones.
El Congreso debe aprobar la incorporación del Perú al Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP) que otorgará mejores condiciones para nuestras exportaciones al Asia-Pacífico y cuatro nuevos mercados: Nueva Zelanda, Brunéi, Vietnam y Malasia. En el 2020, el 58% de las exportaciones a dichos mercados fueron no tradicionales, 60% fueron realizadas por mipymes y 41% fueron productos no tradicionales de regiones como Piura, Ica, y Moquegua. Debe admitirse esta semana, no podemos perder tiempo.
Asimismo, enfrentamos retos. Se deben levantar ciertas restricciones sanitarias y fitosanitarias, así como resolver problemas de inhabilitación de exportaciones a China de plantas pesqueras que limitan los envíos.
Ante la escasez mundial de contenedores, aumento de fletes marítimos (300%) y demoras en los itinerarios (8 días para ingresar al puerto de Hong Kong), enfrentamos el aumento de costos, tanto de exportación como importación, interrupciones en las cadenas de suministro. Un caos que requiere acciones urgentes para mejorar nuestra competitividad.
El próximo gobierno deberá aprovechar el potencial del comercio exterior para la reactivación económica y la generación de empleo. Deberá articular políticas públicas, productivas y de promoción, impulsar la apertura de mercados y potenciar la eficiencia logística. El camino está trazado.
Contenido sugerido
Contenido GEC