Hoy tendrá lugar la elección de la Mesa Directiva del Congreso en momentos en los que este poder del Estado atraviesa sus horas más bajas. Casi ocho meses después de haber conjurado el golpe de Pedro Castillo, su aprobación es de apenas 9%, según la última encuesta de Ipsos. El registro más bajo desde que se inauguró este período de gobierno. La cifra, sin embargo, no sorprende, pues en lo que va del año hemos conocido al menos a una decena de parlamentarios mochasueldos, los hemos visto blindar descaradamente a colegas inmersos en casos como el de ‘Los Niños’ y sacar adelante leyes claramente perjudiciales para el país, como aquella que deforma la colaboración eficaz, recientemente observada por el Ejecutivo, aunque de manera parcial.
Con este cuadro como fondo, lo lógico habría sido que los parlamentarios se asegurasen de que quienes competirán esta mañana para formar parte de su órgano directivo no carguen con cuestionamientos de ningún tipo. Pero como la lógica parece haberse extraviado hace tiempo en los predios del palacio legislativo, hoy los congresistas elegirán entre dos listas ensombrecidas por quienes las integran. Ninguna, para decirlo en pocas palabras, es lo que la alicaída imagen de la institución requiere en estos momentos, y la responsabilidad por ello es únicamente de las bancadas.
La fórmula que parte como favorita está encabezada por el legislador Alejandro Soto (Alianza para el Progreso) y la integran, en calidad de vicepresidentes, Hernando Guerra García (Fuerza Popular), Waldemar Cerrón (Perú Libre) y Rosselli Amuruz (Avanza País). No deja de llamar la atención que tanto Fuerza Popular como Avanza País, que se aliaron con bancadas como Renovación Popular desde el inicio del actual período parlamentario para formar lo que denominaron el Bloque Democrático, aparezcan en una misma fórmula con uno de los representantes más conspicuos de un partido político caracterizado precisamente por su poco apego a la democracia y cuyo líder, Vladimir Cerrón, ha hecho eco de la mentira de que Castillo fue víctima de un “golpe parlamentario” el pasado 7 de diciembre.
La elección de Soto como cabeza de lista también entraña problemas, como varios medios ya han destacado. Este Diario reveló en diciembre que arrastra una serie de investigaciones en la fiscalía y, según un informe de “Perú 21″, ha interpuesto 14 querellas contra periodistas. Consistentemente con este comportamiento contra la prensa, además, fue uno de los 69 legisladores que votaron a favor de la ley mordaza el 4 de mayo, y uno de los 88 que posibilitaron el nombramiento de Josué Gutiérrez como defensor del Pueblo dos semanas después.
En la acera de al frente, sin embargo, la cosa no pinta mejor. Como ya mencionamos en esta página, el candidato Luis Aragón (Acción Popular) –que encabeza la fórmula en la que también están inscritos los legisladores Edgard Reymundo (Cambio Democrático-JPP), Paul Gutiérrez Ticona (Bloque Magisterial) y Elías Varas (Perú Bicentenario)– se encuentra incluido en la investigación que el Ministerio Público dirige por el caso de ‘Los Niños’. Él mismo, además, votó en contra de que sus compañeros de bancada Elvis Vergara, Jorge Luis Flores Ancachi, Darwin Espinoza y Raúl Doroteo fueran acusados constitucionalmente por este caso en mayo pasado.
Aragón además ha sido cuestionado por haber viajado en febrero último a España, invitado por la empresa china Huawei en calidad de titular de la Comisión de Transportes y Comunicaciones. Una travesía que ha despertado las alarmas de un potencial conflicto de intereses, dado que meses después él firmó varios proyectos de ley para exonerar de impuestos la importación de autos eléctricos y brindarles a otros negocios relacionados con estos artefactos determinados “incentivos tributarios”.
Vistos los antecedentes de ambos candidatos y a sus acompañantes, y considerando que uno de ellos será además al cierre de esta jornada la primera opción para reemplazar a la presidenta Dina Boluarte en caso de que sea apartada del cargo, podemos afirmar que, aunque no sabemos con exactitud todos los detalles, el resultado de la votación de hoy será malo, de un lado o del otro.