Sin la animación de otros años, transcurre la Navidad limeña. Ayer solo aumentó el tráfico en el jirón de la Unión. Se observó que la venta de algunas casas comerciales en esa arteria se había acrecentado. A la medianoche las campanas de los templos llamaron a los fieles a la tradicional “Misa de Gallo”. Los templos más concurridos fueron La Merced, San Marcelo, Los Huérfanos, San Pedro y Santa Clara. Los tranvías eléctricos urbanos recorrieron la ciudad hasta después de medianoche. Se ha sentido la crisis económica.