En 1913 el Perú fue víctima de una odiosa campaña de la prensa inglesa, que pretextaba velar por la vida de los nativos del Putumayo. El autor de esa campaña fue el irlandés Roger Casement, que actuaba como funcionario inglés, quien pretendió chantajear a la negociación de los hermanos Arana, a la que exigió cinco mil libras esterlinas en recompensa por el extravío de unas maletas sin valor. Como Arana se negara, Casement se vengó difundiendo hechos ignominiosos contra nuestro país. Casement ha resultado siendo un vulgar espía a favor de Alemania.