La huelga de los obreros textiles de Vitarte no encuentra solución y causa ya grave daño económico a los trabajadores y a los industriales. Ayer, los delegados del comité de huelga se apersonaron ante el jefe del Estado, general Óscar R. Benavides, y le entregaron un memorial de reclamos en el que solicitaban, al mismo tiempo, que terciara en el conflicto para resolverlo satisfactoriamente. El general Benavides escuchó las solicitudes de los obreros y dialogó con ellos. Prometió a los delegados que realizaría todas las gestiones posibles para solucionar el problema.