La Academia Francesa incorporará en su seno al mariscal Foch y a Georges Clemenceau. Este último es el padre de la victoria de Francia como le llaman agradecidos y entusiastas sus soldados y el pueblo. Donde ha brillado siempre como el primero de todos ha sido en la oratoria parlamentaria. Cuando asume la presidencia del gobierno encontró un cuerpo dividido y amorfo y le dio forma y cohesión. Destruyó a traidores, espías y cobardes. Impuso el comando único y acabó con las facciones perversas que amenazaban la vida de Francia.
H.L.M.