La inmodestia en el vestido va tomando cada día mayores proporciones y causando graves males a las almas. Por esta razón, el arzobispo de Lima ha emitido un decreto donde se dice que queda prohibido el ingreso a los templos, en toda la circunscripción de la arquidiócesis a las personas que lleven vestidos inmodestos, particularmente los que dejen descubierta o cubierta únicamente con telas transparentes cualquier parte del cuerpo, fuera de la cabeza y de las manos. Los sacerdotes de las iglesias están obligados a velar por el cumplimiento de este decreto.
H.L.M.