En Europa, tres compañías inglesas mantienen un servicio regular, de pasajeros y de encomiendas, entre París, Londres y Bruselas. Hace poco un gran piano de cola fue llevado desde Londres a París. De acuerdo con la reglamentación aeronáutica británica, que rige desde abril, los pilotos comerciales son examinados física y técnicamente por el gobierno, quien les otorga la licencia para volar. Los campos de aterrizaje y los puntos peligrosos están minuciosamente marcados a lo largo de las rutas. También se emplean señales reguladoras y se han trazado rutas aéreas permanentes.
H.L.M.