El Gobierno de Estados Unidos, por disposición del secretario de Justicia, ha puesto en acción a un verdadero ejército de agentes federales para que pongan fin a los asesinatos que viene cometiendo la secta llamada Ku Klux Klan. Sus víctimas son hombres negros a quienes raptan, torturan y luego asesinan de la manera más cruel. Son, en realidad, sádicos asesinos. En la localidad de Bastrop, Louisiana, el gobernador ha dispuesto que un pelotón de caballería recorra sus calles, noche y día, para detener las fechorías de la secta asesina.
H.L.M.