Según el académico Diccionario de americanismos (2010), esta locución sustantiva se aplica especialmente a niños muy inquietos y traviesos. Pata de Judas se documenta en el Perú, Guatemala y Panamá; pie de Judas parece una variante exclusiva de nuestro castellano. Véase esta descripción de Renato Cisneros referida a su tío Adriano: “El pata de Judas. El Cholo. El imprevisible. El que una madrugada empotró su Camaro deportivo contra el muro de contención de la Vía Expresa y vivió de milagro…” (La República, Lima, 17/3/2012).