Mabel Huertas


Ha llegado el momento de los escuderos. El bromista José Arista no encontró mejor receta para generar confianza en los inversionistas, nacionales e internacionales, que sorprendernos nuevamente con sus ocurrencias verbales. El ministro de Economía cree causar un cosquilleo cuando con tono irónico pretende “pechar” al presidente del Banco Central de Reserva, Julio Velarde, luego de las severas críticas que este hizo al MEF por el manejo antitécnico de la economía y por ceder a la voluntad populista e irresponsable del Congreso.

Arista no da risa, pero gana puntos para convertirse en máximo defensor del mediocre gobierno de Dina Boluarte.

No es el único. El ministro de Educación, Morgan Quero, por voluntad propia, ha obtenido un protagonismo particular dentro del Ejecutivo, no solo por su agitada agenda, que incluye ceremonias, inauguraciones y apretones de manos protocolares, sino por sus declaraciones que lo hacen candidato al escudero del año.

Quero tiene conocidas ambiciones políticas. Un reportaje de “Punto final” (marzo 2024) señalaba que las fuentes consultadas afirmaban que el entonces jefe del gabinete técnico de la presidencia tenía en su poder la grabación que terminó por sacar del cargo al expresidente del Consejo de Ministros Alberto Otárola. Luego de su nombramiento como ministro de Educación, Quero ha fortalecido la confianza que le tiene Dina Boluarte en cada intervención en la prensa. Frente a los micrófonos, el ministro de Educación lanza las más desternillantes frases en su defensa.

Consultado por el preocupante avance de las cifras de pobreza publicadas recientemente por el INEI, Quero resaltó el importante rol que Boluarte tuvo como ministra de Desarrollo e Inclusión Social y afirmó que si no hubiese sido por su trabajo en esa cartera, “ese 29% de pobreza sería mucho más alto”.

En ese mismo contexto, el ministro de Educación dijo que el error del gobierno de Boluarte fue darle “demasiado énfasis al tema del fenómeno de El Niño costero” (“Punto final”, 12 de mayo).

Ayer fue consultado por la desaprobación de su jefa, que, en su peor momento, llegó al 90% (IEP). La respuesta dejó una interrogante en la prensa, pues el ministro denunció un “acoso político” y, con la voz indignada, acusó al resultado de esa encuesta como un acto de violencia “contra nuestra primera mandataria, la primera mujer en ser elegida presidenta de la República”.

Tal parece que en el Ejecutivo hay un concurso para convertirse en el mejor escudero del año y el premio podría ser la Presidencia del Consejo de Ministros.

Mabel Huertas es socia de la consultora 50+Uno

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